La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, señaló que el presidente no tuvo nada que ver en la decisión, pero que sostiene sus dichos anteriores respecto de McCabe.
El mandatario y una serie de republicanos atacaron a McCabe una y otra vez en los últimos meses y lo acusaron de tener prejuicios contra ellos.
Aunque desde hace tiempo se especulaba con esa posibilidad, este abrupto desenlace sorprendió.
McCabe, de 49 años, era vicedirector del Buró Federal de Investigaciones (FBI) desde principios de 2016.
En mayo pasado, Trump despidió al hasta entonces director del organismo, James Comey, en relación a investigaciones del FBI sobre una posible colaboración entre el equipo de campaña de Trump y Rusia para incidir en las elecciones de 2016.
McCabe estaba muy involucrado en esas investigaciones. También supervisaba las investigaciones del caso de los correos electrónicos de la rival de Trump, la candidata demócrata a la presidencia Hillary Clinton. Sin embargo, para fastidio de Trump, las investigaciones no llevaron a ninguna persecución penal.
A Trump le molestó también que la esposa de McCabe se presentara hace poco como candidata demócrata a un puesto en el Senado de Virginia y que en la campaña electoral fuera apoyada financieramente por una organización política de un amigo de Clinton.
El presidente Trump y el secretario de Justicia, Jeff Sessions, al parecer aumentaron fuertemente la presión sobre el jefe del FBI Christopher Wray la semana pasada para que realizara cambios en la cúpula directiva del organismo. Supuestamente le pidieron que reemplazara a la gente de la época de Comey. Según algunos medios, la presión fue tanta que Wray amenazó con renunciar.