Lavrov expuso sus feroces críticas a las políticas de Washington ante un debate especial del Consejo de Seguridad de la ONU sobre el mantenimiento de la paz y seguridad internacional.

El canciller citó los ataques aéreos en Siria, guiados por Estados Unidos, la invasión a Irak en 2003, y la intervención militar en Libia en 2011, como ejemplos de "violaciones de los principios fundamentales de las Naciones Unidas".

"Todo esto es resultado de los intentos de dominar los asuntos globales, de mandar sobre el mundo, en todos lados, de usar el poderío militar unilateralmente para impulsar sus propios intereses", expuso Lavrov ante el Consejo de 15 miembros. 

"Esto ha sumido al Oriente Medio y a África del Norte en la inestabilidad y el caos, y en gran medida, ha sido un caldo de cultivo donde crecen los extremistas", añadió.

Rusia y Estados Unidos han estado enfrentados sobre la guerra en Siria, con el apoyo de Moscú al presidente Bashar Al Assad y oponiéndose a los ataques aéreos de Estados Unidos sobre blancos de la organización Estado Islámico. 

Rusia ha acusado en varias ocasiones a Estados Unidos y a sus aliados occidentales de ingeniar la caída del líder ucraniano Viktor Yanukovych, inclinado hacia Moscú, lo cual desató el levantamiento separatista en Crimea y en el este ucraniano.

"Realmente queremos ver al Consejo de Seguridad como un instrumento efectivo para la paz y la seguridad, o estamos listos para convertirlo en un espacio para la confrontación propagandística", preguntó Lavrov.

Su intervención se dio al tiempo que Ucrania acusaba a los rebeldes prorrusos de concentrar fuerzas cerca del puerto de la ciudad de Mariupol, a pesar del cese el fuego alcanzado entre Ucrania, Rusia, Francia y Alemania.