Saiz fue destituido por su conducta, no para proceder a una renovación del CNI
El Mundo, España
EL GOBIERNO insistió ayer en atribuir el relevo al frente del CNI a motivos de reorganización interna, minimizando las denuncias sobre los abusos de poder y la utilización de medios públicos con fines privados que pesan sobre el ya ex director general.
Sin embargo, diga lo que diga el Gobierno -y algunos medios a los que les da igual que «sean o no ciertas» las irregularidades denunciadas-, no habría habido cambio en el CNI sin haberse destapado la -como poco- impropia conducta de Saiz. Este enmascaramiento en ningún caso puede ocultar que el presidente del Gobierno ha dado crédito a las denuncias de agentes publicadas por EL MUNDO, algunas de las cuales ni siquiera han sido negadas por el propio interesado. Es lógico que el Gobierno haya considerado verosímil lo publicado, puesto que ya tenía alguna noticia. Casi coincidiendo con la ratificación de Saiz, la secretaria general del centro entregó a Carme Chacón una carta enviada por un agente que ratificaba las primeras denuncias publicadas por este diario y calificaba como «corrupción» las prácticas de Saiz. Tal vez por tener conocimiento de lo que hacía el director del CNI, la ministra de Defensa se oponía a su ratificación. Aunque el Gobierno no da por cerrada la investigación sobre Saiz, tampoco parece dispuesto a llegar hasta el final en la atribución de responsabilidades. Eso sí, el nuevo director tendrá manos libres para hacer los cambios que considere oportunos.