"Se puede decir que el diálogo nacional es el lema de la próxima etapa", dijo Asad en un discurso en la Universidad de Damasco, transmitido por la televisión estatal.
"El diálogo nacional podría desembocar en enmiendas de la Constitución o en una nueva Constitución", agregó.
Asad evocó la posible abrogación del artículo que otorga la hegemonía al partido Baas, que gobierna el país desde hace 40 años.
Esa abrogación es una de las principales reivindicaciones de la oposición.
Advirtió además que la economía de Siria está bajo la amenaza de un "colapso". "Hay que obrar para devolver confianza a la economía siria porque existe un riesgo de derrumbe", alertó.
"Hay que buscar un modelo que convenga a Siria", recalcó el mandatario.
En su discurso, el tercero que pronuncia en público desde que se inició el movimiento de protesta, Asad volvió a denunciar "una conspiración" contra Siria y afirmó que no habrá reformas en medio "del caos".
"Los responsables de derramamiento de sangre rendirán cuentas", advirtió.
El régimen sirio afronta desde el 15 de marzo un movimiento de protestas sin precedentes, violentamente reprimido por las fuerzas del régimen.