Snowden critica a Rusia, donde "nunca" tuvo la intención de ir
AFP (Agencia France-Presse)
Oslo, Noruega. - El ex consultor estadounidense Edward Snowden criticó este sábado las limitaciones a la libertad de expresión en Rusia, donde está refugiado desde hace dos años, y arremetió contra otros países por haberle denegado el asilo.
El ex consultor informático, cuya detención pide Estados Unidos por haber revelado el alcance de los programas de espionaje electrónico de la National Security Agency (NSA), hizo sus comentarios por videoconferencia cuando se le entregaba en Mølde (Noruega) el premio Bjørnson a la libertad de expresión.
Interrogado sobre la situación de los derechos humanos, y en particular el control de internet por parte de las autoridades rusas, Snowden se mostró pesimista.
"Es decepcionante, indignante", declaró.
"Esta resolución del gobierno ruso de controlar cada vez más internet y lo que la gente ve, e incluso algunas parte de la vida privada, para decidir cuál es la manera adecuada o no de expresar su amor el uno por el otro, no sólo está fundamentalmente mal, sino que además no es el rol de ningún gobierno", estimó.
Snowden explicó además que no había elegido vivir en Rusia.
"Nunca tuve la intención de ir a Rusia, nunca fue mi proyecto. Simplemente estaba de tránsito, en dirección de América Latina. Por desgracia, mi pasaporte fue congelado, anulado por Estados Unidos".
El estadounidense abandonó en mayo de 2013 su puesto en la isla de Hawái para hacer sus revelaciones al diario británico The Guardian desde Hong Kong. Recordó que la idea de abandonar esta ciudad para dirigirse a Rusia vino del fundador de Wikileaks, Julian Assange.
"Creo que su intención era buena. En primer lugar se centraba en mi seguridad en tanto que editor" y fuente de información, dijo. "Pero para mí, el problema es que yo no estaba interesado en mi propia seguridad y mi propia protección".
"Nunca esperé estar en libertad hoy día. Me esperaba estar en la cárcel".
Snowden criticó además a los gobiernos que hicieron oídos sordos cuando él y sus apoyos les pidieron el asilo, citando países de "Europa occidental", entre ellos Noruega, "de América Latina" y Canadá.
"Pedí asilo en 21 países (...) todos se quedaron en silencio", y se negaron a tratar la demanda porque no fue presentada en su territorio, indicó el norteamericano.
"De hecho Rusia fue uno de los últimos países en los que hice mi demanda".
Cuando en julio de 2013 el avión del presidente boliviano Evo Morales tuvo dificultades para regresar a su país desde Rusia, por sospechas de que pudiera llevar a bordo a Snowden, "quedó clarísimo que aunque me hubieran acordado el asilo en un sitio como Francia, habría sido muy difícil cruzar los países situados por el camino", explicó el ex consultor.
Y añadió que esos países occidentales ignoran las preocupaciones de su opinión pública sobre la vigilancias de las telecomunicaciones.
"En algunos países, que consideraríamos como desarrollados, por ejemplo, Francia, Australia y Canadá, hemos visto leyes muy represivas y restrictivas", lamentó Snowden.
Según él, además de represivas son ineficaces.
"En el ataque a Charlie Hebdo (en París en enero), por ejemplo, los servicios de inteligencia dicen: 'bueno, sabemos quiénes eran esos tipos'. Pues bien, eso no impidió el ataque".
Al preguntársele si él tiene libertad de expresión en Rusia, respondió afirmativamente.
"Y pienso que se debe a que la mayor parte de mis actividades se hacen en internet. Quiero decir que cuando me preguntan dónde vivo, la respuesta más honesta es: en internet".
Interrogado sobre la situación de los derechos humanos, y en particular el control de internet por parte de las autoridades rusas, Snowden se mostró pesimista.
"Es decepcionante, indignante", declaró.
"Esta resolución del gobierno ruso de controlar cada vez más internet y lo que la gente ve, e incluso algunas parte de la vida privada, para decidir cuál es la manera adecuada o no de expresar su amor el uno por el otro, no sólo está fundamentalmente mal, sino que además no es el rol de ningún gobierno", estimó.
Snowden explicó además que no había elegido vivir en Rusia.
"Nunca tuve la intención de ir a Rusia, nunca fue mi proyecto. Simplemente estaba de tránsito, en dirección de América Latina. Por desgracia, mi pasaporte fue congelado, anulado por Estados Unidos".
El estadounidense abandonó en mayo de 2013 su puesto en la isla de Hawái para hacer sus revelaciones al diario británico The Guardian desde Hong Kong. Recordó que la idea de abandonar esta ciudad para dirigirse a Rusia vino del fundador de Wikileaks, Julian Assange.
"Creo que su intención era buena. En primer lugar se centraba en mi seguridad en tanto que editor" y fuente de información, dijo. "Pero para mí, el problema es que yo no estaba interesado en mi propia seguridad y mi propia protección".
"Nunca esperé estar en libertad hoy día. Me esperaba estar en la cárcel".
- Críticas a otros países -
Snowden criticó además a los gobiernos que hicieron oídos sordos cuando él y sus apoyos les pidieron el asilo, citando países de "Europa occidental", entre ellos Noruega, "de América Latina" y Canadá.
"Pedí asilo en 21 países (...) todos se quedaron en silencio", y se negaron a tratar la demanda porque no fue presentada en su territorio, indicó el norteamericano.
"De hecho Rusia fue uno de los últimos países en los que hice mi demanda".
Cuando en julio de 2013 el avión del presidente boliviano Evo Morales tuvo dificultades para regresar a su país desde Rusia, por sospechas de que pudiera llevar a bordo a Snowden, "quedó clarísimo que aunque me hubieran acordado el asilo en un sitio como Francia, habría sido muy difícil cruzar los países situados por el camino", explicó el ex consultor.
Y añadió que esos países occidentales ignoran las preocupaciones de su opinión pública sobre la vigilancias de las telecomunicaciones.
"En algunos países, que consideraríamos como desarrollados, por ejemplo, Francia, Australia y Canadá, hemos visto leyes muy represivas y restrictivas", lamentó Snowden.
Según él, además de represivas son ineficaces.
"En el ataque a Charlie Hebdo (en París en enero), por ejemplo, los servicios de inteligencia dicen: 'bueno, sabemos quiénes eran esos tipos'. Pues bien, eso no impidió el ataque".
Al preguntársele si él tiene libertad de expresión en Rusia, respondió afirmativamente.
"Y pienso que se debe a que la mayor parte de mis actividades se hacen en internet. Quiero decir que cuando me preguntan dónde vivo, la respuesta más honesta es: en internet".