Un soldado de la Fuerza Internacional de Asistencia para Seguridad (ISAF) "murió hoy tras ser alcanzado por un disparo de arma ligera", según un comunicado lapidario de la ISAF que no revela identidad ni nacionalidad de los militares muertos.
La OTAN había anunciado también el viernes la muerte de otro soldado en el sur del país de un tiro de arma ligera.
Después de un año 2009 con mucho el más mortífero para los soldados extranjeros en ocho años de guerra (520 muertos), los cinco primeros meses de 2010 son asimismo los más sangrientos para las fuerzas internacionales desde que, encabezadas por Estados Unidos, echaron del poder a los talibanes a finales de 2001.
Según un recuento de la AFP sobre la base de las cifras de la página de internet independiente icasualties.org, 230 soldados de las fuerzas internacionales han perecido en Afganistán desde el 1 de enero de 2010, casi dos tercios de ellos (143) norteamericanos.
Las tropas estadounidenses componen más de los dos tercios de los 130.000 militares de las fuerzas internacionales en Afganistán, efectivo que debe pasar a 150.000 de aquí al verano, a medida que vayan llegando 30.000 soldados norteamericanos suplementarios prometidos por el presidente Barack Obama.