"El mantenimiento de la paz requerirá que se garantice la tierra y el empleo para los afectados" por el conflicto armado de más de medio siglo, dijo Stiglitz en el foro "El futuro de Colombia: Justicia Social y Economía", en el que participó junto a Santos, Nobel de paz 2016 por sellar un acuerdo con la guerrilla FARC.
Stiglitz enfatizó que se debe trabajar para reducir la "inequidad social", que ha sido una de las causas de la aparición de grupos rebeldes como las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas) y el Ejército de Liberación Nacional (ELN, guevarista), que hace una semana instaló una mesa de diálogo con el gobierno de Santos en Quito.
También añadió que es "esencial tener buenas instituciones que traten el tema de la tierra y su distribución, además de darle tierras (...) a los campesinos".
El problema de la posesión de la tierra es clave en los orígenes del conflicto armado colombiano, y dentro del acuerdo sellado con las FARC en noviembre pasado hay un punto que plantea reformas en el campo.
"Es necesaria una fuerte inversión en el sector rural, que promueva el desarrollo del campo", añadió Stiglitz, para quien el acuerdo de paz trae "oportunidades y retos impresionantes" que solo serán bien aprovechados si sirven para ayudar a superar la inequidad y la pobreza en el país.
En ese sentido, según el premio Nobel de economía es necesario para la paz garantizar trabajo a aquellos que estuvieron involucrados en un conflicto que ha implicado a guerrillas, paramilitares y agentes estatales con un saldo de al menos 260.000 muertos, 60.000 desaparecidos y 6,9 millones de desplazados.
A su turno, Santos anunció que los miembros de las FARC estarían terminando de ingresar en "tres o cuatro días" en las zonas de concentración, donde dejarán progresivamente las armas bajo vigilancia de la ONU y se prepararán para su reintegración a la vida civil.