Tormenta en laborismo británico por acusaciones de antisemitismo
AFP (Agencia France-Presse)
Londres, Reino Unido. - A una semana de unas elecciones locales y regionales cruciales para su líder Jeremy Corbyn, el laborismo británico se sumió en una tormenta por las acusaciones de antisemitismo contra dos destacados miembros.
El partido suspendió el jueves al exalcalde de Londres Ken Livingstone por decir que Hitler apoyó el sionismo, el segundo militante suspendido en 24 horas por razones similares.
"Ken Livingstone fue suspendido por el Partido Laborista, mientras se lleva a cabo una investigación, por desacreditar al partido", dijo un portavoz de la formación liderada por Jeremy Corbyn.
Livingstone dijo en la radio BBC: "Cuando Hitler ganó las elecciones en 1932, su política era entonces que había que trasladar a los judíos a Israel. Apoyó al sionismo antes de enloquecer y matar a seis millones de judíos".
El político estaba defendiendo a la diputada laborista Naz Shah, que fue suspendida el miércoles por haber escrito, en 2014 en Facebook, que habría que trasladar Israel a Estados Unidos.
"He estado en el Partido Laborista 40 años y nunca oí a nadie decir algo antisemítico", dijo Livingstone.
Las declaraciones llevaron a un diputado laborista a insultar a Livingstone en plena calle, un episodio grabado por unas cámaras que muestra la fractura existente en el partido a causa de este asunto.
El diputado John Mann abordó al exalcalde en la calle y le tildó de "racista repugnante" y "apologeta nazi".
A una semana de las elecciones a la alcaldía de Londres y las regionales en Escocia, Gales e Irlanda del Norte, el 5 de mayo, Corbyn negó que el partido atraviese una crisis. "Si hay casos de antisemitismo, nos ocuparemos de ellos", afirma.
Sin embargo, basta con leer la prensa británica para darse cuenta de la magnitud de los daños.
"Tarjeta roja" para el exalcalde de la capital, tituló el diario Daily Mirror, mientras el Daily Mail habló de "guerra civil" en el partido.
El Daily Telegraph ilustró la crisis con una caricatura en la que se puede ver una rosa cuyas raíces bajo tierra forman la palabra "antisemitismo".
Los conservadores no dejaron escapar la ocasión. "Está muy claro que el laborismo tiene un problema de antisemitismo", lanzó el primer ministro conservador David Cameron.
Tom Watson, número dos de los laboristas, se defendió en la BBC: "Lo que dijo ayer Ken Livingstone es vil, agresivo y vulgar, pero Jeremy lo suspendió de manera perfectamente justificada".
Los judíos británicos, sin embargo, no están convencidos. "Odiosas y deshonrosas", dijo sobre las declaraciones de Livingstone la Junta de adjuntos de los judíos británicos, principal organización judía del Reino Unido. "Tiene que ser expulsado del laborismo".
"También me gustaría que Jeremy Corbyn admitiera que sus encuentros en el pasado con antisemitas, antes de convertirse en líder del partido, fueron inapropiados", dijo el presidente de la Junta, Jonathan Arkush.
Corbyn admitió haber coincidido con miembros de las organizaciones Hezbolá y Hamas en una conferencia en el Líbano para hablar del proceso de paz en Medio Oriente. "¿Significa eso que estoy de acuerdo con Hamas y sus actos? No. ¿Significa que estoy de acuerdo con Hezbolá y sus actos? No", afirmó
"Ken Livingstone fue suspendido por el Partido Laborista, mientras se lleva a cabo una investigación, por desacreditar al partido", dijo un portavoz de la formación liderada por Jeremy Corbyn.
Livingstone dijo en la radio BBC: "Cuando Hitler ganó las elecciones en 1932, su política era entonces que había que trasladar a los judíos a Israel. Apoyó al sionismo antes de enloquecer y matar a seis millones de judíos".
El político estaba defendiendo a la diputada laborista Naz Shah, que fue suspendida el miércoles por haber escrito, en 2014 en Facebook, que habría que trasladar Israel a Estados Unidos.
"He estado en el Partido Laborista 40 años y nunca oí a nadie decir algo antisemítico", dijo Livingstone.
Las declaraciones llevaron a un diputado laborista a insultar a Livingstone en plena calle, un episodio grabado por unas cámaras que muestra la fractura existente en el partido a causa de este asunto.
El diputado John Mann abordó al exalcalde en la calle y le tildó de "racista repugnante" y "apologeta nazi".
- Corbyn y Hezbolá -
A una semana de las elecciones a la alcaldía de Londres y las regionales en Escocia, Gales e Irlanda del Norte, el 5 de mayo, Corbyn negó que el partido atraviese una crisis. "Si hay casos de antisemitismo, nos ocuparemos de ellos", afirma.
Sin embargo, basta con leer la prensa británica para darse cuenta de la magnitud de los daños.
"Tarjeta roja" para el exalcalde de la capital, tituló el diario Daily Mirror, mientras el Daily Mail habló de "guerra civil" en el partido.
El Daily Telegraph ilustró la crisis con una caricatura en la que se puede ver una rosa cuyas raíces bajo tierra forman la palabra "antisemitismo".
Los conservadores no dejaron escapar la ocasión. "Está muy claro que el laborismo tiene un problema de antisemitismo", lanzó el primer ministro conservador David Cameron.
Tom Watson, número dos de los laboristas, se defendió en la BBC: "Lo que dijo ayer Ken Livingstone es vil, agresivo y vulgar, pero Jeremy lo suspendió de manera perfectamente justificada".
Los judíos británicos, sin embargo, no están convencidos. "Odiosas y deshonrosas", dijo sobre las declaraciones de Livingstone la Junta de adjuntos de los judíos británicos, principal organización judía del Reino Unido. "Tiene que ser expulsado del laborismo".
"También me gustaría que Jeremy Corbyn admitiera que sus encuentros en el pasado con antisemitas, antes de convertirse en líder del partido, fueron inapropiados", dijo el presidente de la Junta, Jonathan Arkush.
Corbyn admitió haber coincidido con miembros de las organizaciones Hezbolá y Hamas en una conferencia en el Líbano para hablar del proceso de paz en Medio Oriente. "¿Significa eso que estoy de acuerdo con Hamas y sus actos? No. ¿Significa que estoy de acuerdo con Hezbolá y sus actos? No", afirmó