ANKARA, Burak Akinci, (AFP) - Once personas fueron arrestadas el sábado, lo que lleva el total de detenidos y procesados por un tribunal de Estambul a 26, incluyendo jugadores, dirigentes y entrenadores de clubes, en un caso que está provocando un gran escándalo en un país donde el fútbol es el deporte favorito de la población.
El detenido más famoso hasta ahora es el ex jugador internacional Fatih Akyel.
Estas interpelaciones masivas empezaron tras una denuncia interpuesta ante la Federación Turca de Fútbol (TFF) en agosto de 2009 por la sospecha de que existían partidos amañados en la primera, la segunda y la tercera división, explicaron varios medios de comunicación.
La ola de detenciones, considerada como la más importante de la historia del fútbol turco, fue coordinada por la policía de Estambul y se extendió, los pasados jueves y viernes, a otras 25 localidades del país.
Más de 50 personas fueron detenidas, diez de las cuales fueron liberadas más tarde, y algunas están todavía a la espera de una decisión de justicia.
La federación del país aseguró sin embargo que esta operación no estaba relacionada con el escándalo de los partidos trucados en Europa que salió a la luz a finales de 2009, una investigación coordinada por la policía alemana.
Este caso está relacionado con apuestas deportivas y afecta a varios países incluyendo a Turquía, donde se sospecha que hubo 29 partidos trucados.
Según varios periódicos deportivos, esta operación policial demuestra la voluntad de las autoridades de organizar una "limpieza" espectacular y consolidar así la candidatura de Turquía para organizar la Eurocopa-2016, un evento al que también aspiran Francia y Alemania.
Gianni Infantino, el secretario general de la UEFA, felicitó a la Federación Turca por "matar el cáncer y erradicarlo del fútbol turco".
Por su parte, el ministro turco de deportes, Nafiz Özak, declaró que su ministerio había preparado un proyecto de ley para reforzar las penas de prisión contra los autores de trampas en el fútbol que prevé hasta 12 años de cárcel.
La prensa turca habla con frecuencia de la corrupción en el fútbol y de las sospechas de partidos trucados, sobre todo en los encuentros que permiten acceder a una división superior.
Pero además de la corrupción, el fútbol turco también es víctima de las mafias y de la violencia, y a pesar de la vigilancia de las autoridades, hay con frecuencia disturbios en los estadios del país.