Turquía se enfrenta al Gobierno sirio en el enclave kurdo de Afrin
DPA (Deutsche Press Agency-Agencia de Prensa Alemana)
Damasco. - Turquía bombardeó hoy la región de Afrin, en el noroeste de Siria, después de que el Gobierno sirio enviara allí a sus milicias en apoyo de las fuerzas kurdas, que controlan la zona y que son desde hace un mes el objetivo de una ofensiva turca, informó hoy la agencia de noticias estatal siria Sana.
El bombardeo turco en Afrin amenaza con abrir una nueva brecha en el conflicto, pues supone un enfrentamiento directo entre las tropas turcas y los aliados de Damasco en territorio sirio.
Los ataques turcos forzaron de momento la retirada de las milicias aliadas del Gobierno sirio que se estaban entrando en la ciudad de Afrin, y que se replegaron a unos diez kilómetros del centro ante los "disparos de advertencia" turcos, según la agencia de noticias turca Anadolu.
Una fuente kurda dijo a dpa en condición de anonimato que al menos cinco proyectiles impactaron cerca de una carretera utilizada por las fuerzas sirias, mientras la televisión pro-gubernamental Al Mayadeen mostró imágenes de una explosión que atribuyó a un ataque turco. Los periodistas sobre el terreno huyeron de la zona, informó la televisión siria.
Poco antes, las milicias aliadas al presidente sirio, Bashar al Assad, habían entardo en el enclave homónimo, según confirmaron las milicias kurdas Unidades de Protección Popular (YPG) que controlan la zona. El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos matizó que se trataba de una avanzadilla de las llamadas "fuerzas populares" y que no llevaban consigo armas pesadas.
Las YPG son el objetivo de la ofensiva turca "Rama de Olivo" lanzada hace un mes por Ankara. Son son aliadas de la coalición liderada por Estados Unidos contra la milicia terrorista Estado Islámico (EI), pero Turquía las acusa de estar vinculadas al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), una organización turca prohibida y considerada terrorista tanto por Turquía como por Estados Unidos y la Unión Europea (UE).
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, había anunciado horas antes la intención de sus tropas de sitiar Afrin y había alertado la víspera a Damasco que no enviara a sus tropas en apoyo de los kurdos. Actualmente, las fuerzas turcas se encuentran a más de 17 kilómetros de Afrin, según el Observatorio Sirio.
"En los próximos días" quedará rodeado el centro de la ciudad, aseguró Erdogan ante miembros de su partido AKP en Ankara. "De esa forma se bloqueará la ayuda desde el exterior y la organización terrorista no tendrá la posibilidad de negociar con nadie", dijo el presidente turco respecto a las negociaciones de los kurdos con el Gobierno de Damasco para el envío de las tropas que llegaron hoy.
Rusia alertó hoy del peligro de división que corre Siria a causa del conflicto entre Turquía y los kurdos, dijo el ministro de Exteriores, Serguei Lavrov, en Moscú. Es inaceptable que el "problema kurdo" se utilice para sembrar el caos en la región y para dividir, señaló.
Lavov dijo comprender tanto la postura de Turquía como a los kurdos. En cualquier caso, la cuestión debe resolverse respetando la unidad territorial de Siria, señaló.
En la guerra, Rusia es un importante aliado del Gobierno sirio, mientras Turquía apoya a la oposición. Sin embargo, Rusia y Turquía llevan tiempo colaborando juntos en la búsqueda de una solución pacífica y lanzaron junto a Irán una iniciativa paralela a la mediada por Naciones Unidas.
Los ataques turcos forzaron de momento la retirada de las milicias aliadas del Gobierno sirio que se estaban entrando en la ciudad de Afrin, y que se replegaron a unos diez kilómetros del centro ante los "disparos de advertencia" turcos, según la agencia de noticias turca Anadolu.
Una fuente kurda dijo a dpa en condición de anonimato que al menos cinco proyectiles impactaron cerca de una carretera utilizada por las fuerzas sirias, mientras la televisión pro-gubernamental Al Mayadeen mostró imágenes de una explosión que atribuyó a un ataque turco. Los periodistas sobre el terreno huyeron de la zona, informó la televisión siria.
Poco antes, las milicias aliadas al presidente sirio, Bashar al Assad, habían entardo en el enclave homónimo, según confirmaron las milicias kurdas Unidades de Protección Popular (YPG) que controlan la zona. El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos matizó que se trataba de una avanzadilla de las llamadas "fuerzas populares" y que no llevaban consigo armas pesadas.
Las YPG son el objetivo de la ofensiva turca "Rama de Olivo" lanzada hace un mes por Ankara. Son son aliadas de la coalición liderada por Estados Unidos contra la milicia terrorista Estado Islámico (EI), pero Turquía las acusa de estar vinculadas al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), una organización turca prohibida y considerada terrorista tanto por Turquía como por Estados Unidos y la Unión Europea (UE).
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, había anunciado horas antes la intención de sus tropas de sitiar Afrin y había alertado la víspera a Damasco que no enviara a sus tropas en apoyo de los kurdos. Actualmente, las fuerzas turcas se encuentran a más de 17 kilómetros de Afrin, según el Observatorio Sirio.
"En los próximos días" quedará rodeado el centro de la ciudad, aseguró Erdogan ante miembros de su partido AKP en Ankara. "De esa forma se bloqueará la ayuda desde el exterior y la organización terrorista no tendrá la posibilidad de negociar con nadie", dijo el presidente turco respecto a las negociaciones de los kurdos con el Gobierno de Damasco para el envío de las tropas que llegaron hoy.
Rusia alertó hoy del peligro de división que corre Siria a causa del conflicto entre Turquía y los kurdos, dijo el ministro de Exteriores, Serguei Lavrov, en Moscú. Es inaceptable que el "problema kurdo" se utilice para sembrar el caos en la región y para dividir, señaló.
Lavov dijo comprender tanto la postura de Turquía como a los kurdos. En cualquier caso, la cuestión debe resolverse respetando la unidad territorial de Siria, señaló.
En la guerra, Rusia es un importante aliado del Gobierno sirio, mientras Turquía apoya a la oposición. Sin embargo, Rusia y Turquía llevan tiempo colaborando juntos en la búsqueda de una solución pacífica y lanzaron junto a Irán una iniciativa paralela a la mediada por Naciones Unidas.