UE exige a Londres que aclare sus posiciones sobre el "Brexit"
DPA (Deutsche Press Agency-Agencia de Prensa Alemana)
Bruselas. - La Unión Europea (UE) exigió a Reino Unido que aclare antes de finales de agosto sus posiciones sobre las principales cuestiones que regularán su salida del bloque, dijo hoy el negociador europeo Michel Barnier al finalizar la segunda ronda de negociaciones en Bruselas.
Londres debe presentar una clara postura especialmente en relación a sus obligaciones financieras con la UE, dijo Barnier al término de la nueva de ronda de diálogo que arrancó el lunes y culminó hoy sin avances visibles.
Por su parte, el ministro británico para el "Brexit", David Davis, exigió a Bruselas que la UE se mueva de sus posiciones para poder llegar a un acuerdo que regule la salida de su país del grupo europeo.
Las dos partes hablaron hoy por primera vez de forma concreta sobre las numerosas cuestiones controvertidas que giran en torno al "Brexit", como los derechos de permanencia de los en torno a 3,2 millones de ciudadanos de la UE que viven en Reino Unido y de los 1,2 millones de británicos en otros países del bloque, así como la factura que Londres debe saldar como resultado de sus compromisos adquiridos como miembro de la UE.
También debe definirse cómo quedará la frontera entre Irlanda e Irlanda del Norte, que pasaría a ser frontera exterior de la UE tras el "Brexit".
El Gobierno británico reconoció oficialmente la semana pasada la existencia de obligaciones financieras, pero todos los detalles siguen abiertos y no se debatieron en profundidad esta semana, señalaron fuentes de las negociaciones. "Queremos conseguir una salida regulada de Reino Unido, lo que significa que deben también regularse los compromisos financieros", señaló.
Según las fuentes, Londres habría retrasado ese debate. De ahí que Barnier exigiera a Reino Unido que ponga en claro su postura cuanto antes. También exigió una postura clara de Londres sobre los derechos de los residentes y la cuestión de Irlanda de cara a la tercera ronda de diálogo que comenzará el 28 de agosto.
Reino Unido ya presentó un documento sobre los derechos de permanencia de los ciudadanos de otros países europeos, pero Barnier consideró que en esa cuestión sigue habiendo "diferencias fundamentales".
Más positivo fue el balance presentado por Davis, que habló de avances en numerosas cuestiones. "Hemos tenido conversaciones fuertes, pero constructivas esta semana", dijo sobre las cuentas de Londres con la UE. Sin embargo, queda mucho por hablar, matizó. "Al final se necesitará flexibilidad por las dos partes para alcanzar una solución", consideró.
El objetivo de las negociaciones, que comenzaron formalmente el pasado junio un año después de que los británicos votaran por salir del bloque en referéndum, es crear un acuerdo marco que regule el "Brexit", que debe ser una realidad a finales de marzo de 2019.
La UE no quiere hablar sobre su futura relación con Reino Unido antes de no haber realizado "suficientes avances" en otras cuestiones y para ello se ha puesto un plazo provisional hasta este mes de octubre.
Por su parte, el ministro británico para el "Brexit", David Davis, exigió a Bruselas que la UE se mueva de sus posiciones para poder llegar a un acuerdo que regule la salida de su país del grupo europeo.
Las dos partes hablaron hoy por primera vez de forma concreta sobre las numerosas cuestiones controvertidas que giran en torno al "Brexit", como los derechos de permanencia de los en torno a 3,2 millones de ciudadanos de la UE que viven en Reino Unido y de los 1,2 millones de británicos en otros países del bloque, así como la factura que Londres debe saldar como resultado de sus compromisos adquiridos como miembro de la UE.
También debe definirse cómo quedará la frontera entre Irlanda e Irlanda del Norte, que pasaría a ser frontera exterior de la UE tras el "Brexit".
El Gobierno británico reconoció oficialmente la semana pasada la existencia de obligaciones financieras, pero todos los detalles siguen abiertos y no se debatieron en profundidad esta semana, señalaron fuentes de las negociaciones. "Queremos conseguir una salida regulada de Reino Unido, lo que significa que deben también regularse los compromisos financieros", señaló.
Según las fuentes, Londres habría retrasado ese debate. De ahí que Barnier exigiera a Reino Unido que ponga en claro su postura cuanto antes. También exigió una postura clara de Londres sobre los derechos de los residentes y la cuestión de Irlanda de cara a la tercera ronda de diálogo que comenzará el 28 de agosto.
Reino Unido ya presentó un documento sobre los derechos de permanencia de los ciudadanos de otros países europeos, pero Barnier consideró que en esa cuestión sigue habiendo "diferencias fundamentales".
Más positivo fue el balance presentado por Davis, que habló de avances en numerosas cuestiones. "Hemos tenido conversaciones fuertes, pero constructivas esta semana", dijo sobre las cuentas de Londres con la UE. Sin embargo, queda mucho por hablar, matizó. "Al final se necesitará flexibilidad por las dos partes para alcanzar una solución", consideró.
El objetivo de las negociaciones, que comenzaron formalmente el pasado junio un año después de que los británicos votaran por salir del bloque en referéndum, es crear un acuerdo marco que regule el "Brexit", que debe ser una realidad a finales de marzo de 2019.
La UE no quiere hablar sobre su futura relación con Reino Unido antes de no haber realizado "suficientes avances" en otras cuestiones y para ello se ha puesto un plazo provisional hasta este mes de octubre.