Vaticano desmiente a cardenal que lo acusó de "venderse" a China
DPA (Deutsche Press Agency-Agencia de Prensa Alemana)
Ciudad del Vaticano. - El papa Francisco se enfrenta a críticas "sorprendentes y lamentables", expresó hoy el Vaticano un día después de que un cardenal de Hong Kong acusara a ese Estado de "venderse" a China.
El portavoz del Vaticano, Greg Burke, dijo en un comunicado que el papa estaba en "contacto permanente" con colaboradores y que "sigue con especial atención" a la iglesia católica en China y los esfuerzos de diálogo con Pekín.
"Es por lo tanto sorprendente y lamentable que se afirme lo contrario por parte de miembros de la iglesia, que fomenta la confusión y la controversia", dijo Burke.
El lunes, el cardenal y ex obispo de Hong Kong, Joseph Zen, ratificó una noticia del portal "AsiaNews" sobre los supuestos intentos del Vaticano de apaciguar las relaciones con autoridades chinas, y sugirió que se realizaban a espaldas del papa.
Según "AsiaNews", una agencia de noticias religiosa, un diplomático del Vaticano dijo a dos obispos retirados y reconocidos por la iglesia católica que se retiraran en favor de prelados excomulgados y respaldados por las autoridades chinas.
Tras romper relaciones diplomáticas en 1951, el régimen comunista abrió una iglesia paralela reglamentada por el Estado, e insiste en designar a sus obispos, una prerrogativa que normalmente se atribuye al papa.
En diciembre, Francisco pidió "paciencia" al considerar que los esfuerzos para estrechar la brecha entre el catolicismo informal y el reglamentado por el Gobierno chino "deben darse paso a paso, delicadamente".
"Es por lo tanto sorprendente y lamentable que se afirme lo contrario por parte de miembros de la iglesia, que fomenta la confusión y la controversia", dijo Burke.
El lunes, el cardenal y ex obispo de Hong Kong, Joseph Zen, ratificó una noticia del portal "AsiaNews" sobre los supuestos intentos del Vaticano de apaciguar las relaciones con autoridades chinas, y sugirió que se realizaban a espaldas del papa.
Según "AsiaNews", una agencia de noticias religiosa, un diplomático del Vaticano dijo a dos obispos retirados y reconocidos por la iglesia católica que se retiraran en favor de prelados excomulgados y respaldados por las autoridades chinas.
Tras romper relaciones diplomáticas en 1951, el régimen comunista abrió una iglesia paralela reglamentada por el Estado, e insiste en designar a sus obispos, una prerrogativa que normalmente se atribuye al papa.
En diciembre, Francisco pidió "paciencia" al considerar que los esfuerzos para estrechar la brecha entre el catolicismo informal y el reglamentado por el Gobierno chino "deben darse paso a paso, delicadamente".