Las imágenes, difundidas en bucle por las televisiones locales desde el miércoles, corresponden presuntamente a los enfrentamientos de la noche del 3 de mayo entre soldados y ladrones de combustible, durante los que fallecieron 10 personas, entre ellas cuatro militares.

La Secretaría de Defensa (Sedena) aseguró entonces que los soldados abrieron fuego tras las "agresiones" perpetradas por los delincuentes, algunos de los cuales usaron "niños y mujeres" como escudos.

Tras la difusión del video, que inundó las redes sociales, la Sedena puso en entredicho "el momento en el que al parecer un elemento militar efectúa un disparo sobre un civil ya sometido".

La institución castrense pidió a la fiscalía federal esclarecer "fehacientemente" el video, "para determinar con precisión si corresponde al lugar y evento de referencia, así como si es auténtico o editado".

La fiscalía general dijo en un comunicado que las imágenes "aparentemente fueron grabadas por cámaras de un circuito cerrado de la zona" y que "ya forman parte de las investigaciones".

En las imágenes se aprecia un automóvil particular sobre el que cae una ráfaga de balas. Después se ve a individuos vestidos de militares rodeándolo y a uno de ellos revisando el interior del vehículo, del que finalmente saca a un hombre con ropa de civil y chaleco antibalas.

El soldado obliga al civil a tenderse sobre el piso y con un punta pie lo obliga a girar para quedarse boca abajo.

Tras un corte en el video, vuelve a aparecer la misma escena con el civil aún tendido en el piso y militares caminando a su alrededor en posición de alerta. Luego su cuerpo se mueve al recibir presuntamente un disparo que provoca un charco de sangre.

La Comisión Nacional de Derechos Humanos (Ombudsman) advirtió que "reprueba todo acto violento que esté fuera de la ley, independientemente de quien provenga" y reclamó a las autoridades que las "investigaciones se lleven a cabo con la mayor celeridad posible".

La prensa mexicana se ha mostrado dividida sobre la interpretación de las imágenes. Algunos medios afirman que se percibe claramente que un militar ejecuta al civil, mientras que otros apuntan que es imposible esclarecer el origen de la presunta bala.
 

"Hay normas básicas (de actuación) y todas ellas se violan en este video, que ojalá sirva para investigar estos hechos", dijo al diario Reforma José Miguel Vivanco, director de la División de las Américas de Human Rights Watch.

En abril quedó estancada en el Senado una iniciativa para legalizar la participación del Ejército en operativos que corresponden a la policía. Sin embargo, aprobó la ley contra la tortura.

El 30 de junio de 2014, 22 presuntos delincuentes murieron durante un operativo militar. La Sedena afirmó que sus soldados respondieron a un ataque de presuntos delincuentes, pero la CNDH documentó que al menos 15 de las víctimas fueron ejecutadas. Ocho militares involucrados en ese choque fueron absueltos y liberados.