AFP (Agencia France-Presse)
SANA. - Las autoridades yemeníes y la rebelión chiita alcanzaron un acuerdo para poner fin a la crisis en la que está inmerso el país desde hace más de tres semanas, informó este jueves una fuente próxima a la presidencia en Saná.
El acuerdo prevé el nombramiento, en un plazo de 48 horas, de un nuevo primer ministro, una bajada de los precios de los carburantes y el desmantelamiento de los campamentos instalados por los insurgentes desde el 18 de agosto en la capital, Saná, y en sus alrededores, agregó la fuente.
La rebelión chiita de Ansarualá acusa al gobierno de corrupción. En las últimas semanas ha intensificado las protestas, sobre todo con manifestaciones multitudinarias.
Los enfrentamientos con las fuerzas de seguridad causaron al menos nueve muertos desde el domingo, afirmó la fuente. Según las autoridades, un conductor de ambulancias también perdió la vida en los actos violentos registrados el fin de semana.
El domingo, los rebeldes intentaron asaltar la sede del gobierno en Saná.
Los rebeldes de Ansarualá quieren ampliar su zona de influencia en el futuro Estado federal que contará con seis provincias. Actualmente los chiitas son mayoritarios en el norte del país, y a escala nacional lo son los sunitas.