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Política
La nueva definición adoptada por el Ministerio de Trabajo brasileño considera "trabajo esclavo" o análogo a "toda forma de labor, de naturaleza física y mental, que por su extensión o intensidad acarree la violación del derecho del trabajador a seguridad, salud, descanso y convivencia familiar".
Esta nueva normativa endurece la definición de esclavitud con respecto a la determinada por la cartera de Trabajo en octubre, cuando redujo la consideración de trabajo forzado a la privación de libertad de movimiento del trabajador.
Asimismo, la nueva normativa establece que la divulgación de lo que en Brasil se conoce como "lista sucia" de las empresas acusadas de prácticas esclavistas ya no necesitará la orden expresa del titular del Ministerio de Trabajo. Volverá a ser publicada por el mismo equipo técnico encargado de confeccionarla y de fiscalizar las condiciones laborales en el país.
Asimismo, la normativa publicada hoy por el boletín oficial de Brasil devuelve a los fiscales del trabajo la autonomía para efectuar rescates de forma inmediata cuando detecten condiciones análogas a la esclavitud. Según la normativa de octubre, solo podían hacerlo acompañados de la Policía y después de haber realizado una denuncia en una comisaría.
La disposición sobre trabajo forzado fue firmada por el saliente ministro de Trabajo, Ronaldo Nogueira, quien el miércoles presentó su renuncia y oficialmente hoy deja su cargo.
La flexibilización de la definición de trabajo esclavo en octubre generó una gran polémica en Brasil hasta el punto de que la Corte Suprema suspendió la normativa el 24 octubre al considerar inconstitucionales algunas partes.
Asimismo, las críticas también llegaron de fuera del país y la ONU llegó a manifestar su "profunda preocupación" sobre las nuevas disposiciones.
Esta nueva normativa endurece la definición de esclavitud con respecto a la determinada por la cartera de Trabajo en octubre, cuando redujo la consideración de trabajo forzado a la privación de libertad de movimiento del trabajador.
Asimismo, la nueva normativa establece que la divulgación de lo que en Brasil se conoce como "lista sucia" de las empresas acusadas de prácticas esclavistas ya no necesitará la orden expresa del titular del Ministerio de Trabajo. Volverá a ser publicada por el mismo equipo técnico encargado de confeccionarla y de fiscalizar las condiciones laborales en el país.
Asimismo, la normativa publicada hoy por el boletín oficial de Brasil devuelve a los fiscales del trabajo la autonomía para efectuar rescates de forma inmediata cuando detecten condiciones análogas a la esclavitud. Según la normativa de octubre, solo podían hacerlo acompañados de la Policía y después de haber realizado una denuncia en una comisaría.
La disposición sobre trabajo forzado fue firmada por el saliente ministro de Trabajo, Ronaldo Nogueira, quien el miércoles presentó su renuncia y oficialmente hoy deja su cargo.
La flexibilización de la definición de trabajo esclavo en octubre generó una gran polémica en Brasil hasta el punto de que la Corte Suprema suspendió la normativa el 24 octubre al considerar inconstitucionales algunas partes.
Asimismo, las críticas también llegaron de fuera del país y la ONU llegó a manifestar su "profunda preocupación" sobre las nuevas disposiciones.
