Inicio
Política
Diego El Cigala
"Fue mágico, la música sonaba celestial", dijo el cantaor en una conversación con la AFP al día siguiente del concierto en la monumental iglesia Saint Eustache, que cerró con broche de oro el Festival de la Diversidad Cultural organizado por el Ayuntamiento de París y el Instituto Cervantes.
"Sentí que casi tocaba a Dios", dijo Diego Ramón Jiménez Salazar, quien hace unos años cantaba en el Rastro de Madrid y que después de "Lágrimas negras", el disco que grabó con el pianista cubano Bebo Valdés en 2004, abarrota las salas de concierto del mundo, desde Nueva York a Tokio, pasando por Buenos Aires, Londres y México.
El llamado "Príncipe de los gitanos" expresó su alegría de cantar en una Francia post Nicolas Sarkozy, derrotado en las elecciones presidenciales de mayo pasado.
"Sarkozy quería ser como los Reyes Católicos, quería echar a los gitanos. Y ahora es él quien se fue", dijo El Cigala. "En cambio, ese tío (el presidente François) Hollande, me encanta, no es insípido como casi todos los políticos, tiene sentido del humor".
En la conversación --entrecortada de cantares, recuerdos y sueños-- El Cigala habló sobre todo de su maravilloso encuentro con Bebo Valdés y con la música de América Latina, que le "cambiaron la vida".
"Mi encuentro con Bebo Valdés ha sido el mayor regalo que me ha dado la vida", dijo el cantaor. "Cuando lo conocí, conocí a mi héroe".
"Nunca la vida me pudo haber dado un mayor premio", reafirmó el madrileño, que ha conquistado decenas de premios, entre ellos cuatro gramófonos dorados.
"A raíz de ese encuentro con Bebo, conocí la música cubana, la música de Benny Moré, Chano Pozo, Rolando Laserie, Bola de Nieve", añadió el cantaor, que el año pasado ganó el Grammy Latino en la categoría Mejor Album de Tango, por su disco "Cigala y Tango".
Interrogado sobre a qué atribuía el éxito de "Lágrimas Negras", el disco flamenco más vendido en el mundo, El Cigala lo atribuyó a "dos palabras" que le dijo Bebo. "El me dijo: 'mira Diego, tu canta como ese gitano que eres, y yo tocaré el piano como ese cubano que soy'".
"Esa fue la química. Porque cantar flamenco en bolero, pues eso nunca había sido hecho. Y ese disco sigue haciendo vibrar todas las salas de concierto del mundo", señaló.
"Toda Latinoamérica lleva 'Lagrimas negras' en su corazón. Fíjate que el otro día estaba en Cancún, y fue una locura. Con las primeras notas de 'Inolvidable', uno de los temas de ese disco, se vino el teatro para abajo".
El también llamado "Sinatra gitano" reveló a la AFP algunos de los recuerdos que dijo guarda en su corazón.
"Uno de los más hermosos fue cuando una noche en Buenos Aires un hombre me regaló la antología entera de Roberto Goyeneche, de Carlos Gardel y de Julio Sosa. Y me fui para mi casa, y aluciné", dijo. "De ahí nació mi disco de tangos", agregó, expresando su tristeza por no haber podido realizar su sueño de cantar con Mercedes Sosa, porque "cayó enfermita".
"El tango y el flamenco son dos mundos totalmente diferentes, pero muy parecidos. Son dos mundos nocturnos, nostálgicos. Diferente música, pero un mismo sentir lleno de ansiedad, amor, desamor, pena, alegría, traición, desengaño".
"Y en el bolero es lo mismo. Así que yo me siento como pez en el agua con esas músicas latinas", dijo El Cigala, que reveló que su próximo proyecto es hacer un disco de "boleros rancheros", con el cantante mexicano José Alfredo Jiménez, con música también de Agustín Lara y Javier Solís.
"Si Dios quiere haré ese disco en directo en un concierto en Bellas Artes, en febrero o marzo del 2013. Tengo la intención de invitar a Vicente Fernández, a Armando Manzanero"
"Cantar boleros en una voz flamenca, nunca se ha hecho. Y me gustaría invitar a mi querida Chavela Vargas. Si ella pudiera, sería 'bien padre', como dicen los mexicanos", dijo El Cigala, que adelantó también que sueña con un disco en el que se unan la música clásica y el flamenco.
"Quiero hacer un disco cantando piezas de Manuel de Falla, con la Filarmónica de Viena. La Filarmónica ya me lo ofreció", concluyó, con una sonrisa llena de ensueños... flamencos.
"Sentí que casi tocaba a Dios", dijo Diego Ramón Jiménez Salazar, quien hace unos años cantaba en el Rastro de Madrid y que después de "Lágrimas negras", el disco que grabó con el pianista cubano Bebo Valdés en 2004, abarrota las salas de concierto del mundo, desde Nueva York a Tokio, pasando por Buenos Aires, Londres y México.
El llamado "Príncipe de los gitanos" expresó su alegría de cantar en una Francia post Nicolas Sarkozy, derrotado en las elecciones presidenciales de mayo pasado.
"Sarkozy quería ser como los Reyes Católicos, quería echar a los gitanos. Y ahora es él quien se fue", dijo El Cigala. "En cambio, ese tío (el presidente François) Hollande, me encanta, no es insípido como casi todos los políticos, tiene sentido del humor".
En la conversación --entrecortada de cantares, recuerdos y sueños-- El Cigala habló sobre todo de su maravilloso encuentro con Bebo Valdés y con la música de América Latina, que le "cambiaron la vida".
"Mi encuentro con Bebo Valdés ha sido el mayor regalo que me ha dado la vida", dijo el cantaor. "Cuando lo conocí, conocí a mi héroe".
"Nunca la vida me pudo haber dado un mayor premio", reafirmó el madrileño, que ha conquistado decenas de premios, entre ellos cuatro gramófonos dorados.
"A raíz de ese encuentro con Bebo, conocí la música cubana, la música de Benny Moré, Chano Pozo, Rolando Laserie, Bola de Nieve", añadió el cantaor, que el año pasado ganó el Grammy Latino en la categoría Mejor Album de Tango, por su disco "Cigala y Tango".
Interrogado sobre a qué atribuía el éxito de "Lágrimas Negras", el disco flamenco más vendido en el mundo, El Cigala lo atribuyó a "dos palabras" que le dijo Bebo. "El me dijo: 'mira Diego, tu canta como ese gitano que eres, y yo tocaré el piano como ese cubano que soy'".
"Esa fue la química. Porque cantar flamenco en bolero, pues eso nunca había sido hecho. Y ese disco sigue haciendo vibrar todas las salas de concierto del mundo", señaló.
"Toda Latinoamérica lleva 'Lagrimas negras' en su corazón. Fíjate que el otro día estaba en Cancún, y fue una locura. Con las primeras notas de 'Inolvidable', uno de los temas de ese disco, se vino el teatro para abajo".
El también llamado "Sinatra gitano" reveló a la AFP algunos de los recuerdos que dijo guarda en su corazón.
"Uno de los más hermosos fue cuando una noche en Buenos Aires un hombre me regaló la antología entera de Roberto Goyeneche, de Carlos Gardel y de Julio Sosa. Y me fui para mi casa, y aluciné", dijo. "De ahí nació mi disco de tangos", agregó, expresando su tristeza por no haber podido realizar su sueño de cantar con Mercedes Sosa, porque "cayó enfermita".
"El tango y el flamenco son dos mundos totalmente diferentes, pero muy parecidos. Son dos mundos nocturnos, nostálgicos. Diferente música, pero un mismo sentir lleno de ansiedad, amor, desamor, pena, alegría, traición, desengaño".
"Y en el bolero es lo mismo. Así que yo me siento como pez en el agua con esas músicas latinas", dijo El Cigala, que reveló que su próximo proyecto es hacer un disco de "boleros rancheros", con el cantante mexicano José Alfredo Jiménez, con música también de Agustín Lara y Javier Solís.
"Si Dios quiere haré ese disco en directo en un concierto en Bellas Artes, en febrero o marzo del 2013. Tengo la intención de invitar a Vicente Fernández, a Armando Manzanero"
"Cantar boleros en una voz flamenca, nunca se ha hecho. Y me gustaría invitar a mi querida Chavela Vargas. Si ella pudiera, sería 'bien padre', como dicen los mexicanos", dijo El Cigala, que adelantó también que sueña con un disco en el que se unan la música clásica y el flamenco.
"Quiero hacer un disco cantando piezas de Manuel de Falla, con la Filarmónica de Viena. La Filarmónica ya me lo ofreció", concluyó, con una sonrisa llena de ensueños... flamencos.
