PARIS, (AFP) - El cardenal Bernard Law, acusado de haber protegido a sacerdotes pedófilos, fue obligado a dimitir del arzobispado de Boston (este), en 2002. En 2004, una investigación criminal estableció en 4.400 el número de curas pedófilos en Estados Unidos entre 1950 y 2002, y en 11.000 el de los niños que fueron sus víctimas.
- En Canadá, la Iglesia católica y otras iglesias, así como el gobierno canadiense, tuvieron que pagar 1.000 millones de dólares canadienses (706 millones de euros) de indemnizaciones en 2002.
- En Australia se produjeron agresiones sexuales en los años 70 y a principios de los 80, sobre todo contra alumnos del internado católico Saint Stanislas en Bathurst (oeste de Sydney).
- En Irlanda, responsables del arzobispado de Dublin ocultaron los abusos sexuales cometidos por sacerdotes contra cientos de niños durante décadas. Aparentemente, 14.500 niños fueron víctimas de estos abusos. Cuatro obispos presentaron su renuncia.
- En México, el fundador de los Legionarios de Cristo, el padre Marcial Marciel, tuvo que abandonar todos sus cargos en 2006 por actos de pedofilia.
- En Austria, el arzobispo de Viena, el cardenal Hans Hermann Groër, renunció en 1995, y después el arzobispo de Poznan (Polonia), monseñor Juliusz Paetz, hizo lo mismo en 2002, tras ser acusados de acoso sexual.
Tres sacerdotes de un monasterio del norte de Austria fueron revocados por actos pedófilos contra alumnos en los años 80, mientras que, según el diario Der Standard, se registraron abusos sexuales en el coro de los Pequeños Cantores de Viena.
- En Alemania, la Iglesia católica es objeto desde enero pasado de una serie de acusaciones, procedentes sobre todo de niños que estuvieron en escuelas e internados en los años 70 y 80, lo que provocó la cólera del gobierno.
Se denunciaron abusos sexuales contra niños en 19 de las 27 diócesis católicas alemanas. Entre las revelaciones más recientes figuran abusos contra los pequeños cantores de la coral de Ratisbona, dirigida de 1964 a 1994 por el hermano del Papa, monseñor Georg Ratzinger.
- Otros países están involucrados, sobre todo España y Francia, donde la Conferencia Episcopal denunció este fenómeno que concierne a algunos curas, en noviembre de 2000, y a países africanos, fundamentalmente Senegal.
- En Canadá, la Iglesia católica y otras iglesias, así como el gobierno canadiense, tuvieron que pagar 1.000 millones de dólares canadienses (706 millones de euros) de indemnizaciones en 2002.
- En Australia se produjeron agresiones sexuales en los años 70 y a principios de los 80, sobre todo contra alumnos del internado católico Saint Stanislas en Bathurst (oeste de Sydney).
- En Irlanda, responsables del arzobispado de Dublin ocultaron los abusos sexuales cometidos por sacerdotes contra cientos de niños durante décadas. Aparentemente, 14.500 niños fueron víctimas de estos abusos. Cuatro obispos presentaron su renuncia.
- En México, el fundador de los Legionarios de Cristo, el padre Marcial Marciel, tuvo que abandonar todos sus cargos en 2006 por actos de pedofilia.
- En Austria, el arzobispo de Viena, el cardenal Hans Hermann Groër, renunció en 1995, y después el arzobispo de Poznan (Polonia), monseñor Juliusz Paetz, hizo lo mismo en 2002, tras ser acusados de acoso sexual.
Tres sacerdotes de un monasterio del norte de Austria fueron revocados por actos pedófilos contra alumnos en los años 80, mientras que, según el diario Der Standard, se registraron abusos sexuales en el coro de los Pequeños Cantores de Viena.
- En Alemania, la Iglesia católica es objeto desde enero pasado de una serie de acusaciones, procedentes sobre todo de niños que estuvieron en escuelas e internados en los años 70 y 80, lo que provocó la cólera del gobierno.
Se denunciaron abusos sexuales contra niños en 19 de las 27 diócesis católicas alemanas. Entre las revelaciones más recientes figuran abusos contra los pequeños cantores de la coral de Ratisbona, dirigida de 1964 a 1994 por el hermano del Papa, monseñor Georg Ratzinger.
- Otros países están involucrados, sobre todo España y Francia, donde la Conferencia Episcopal denunció este fenómeno que concierne a algunos curas, en noviembre de 2000, y a países africanos, fundamentalmente Senegal.