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Miguel Herberg, quien asegura ser el dueño de un material documental filmado entre 1973 y 1974 en los campos de prisioneros de Pisagua y Chacabuco (norte) bajo la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), criticó el supuesto desinterés de las autoridades chilenas por preservar dichas filmaciones.
Según el cineasta, estuvo "más de 35 años ofreciéndolo a Chile, al Museo de la Memoria Histórica, a Isabel Allende y a la Fundación de Salvador Allende, pero nunca hubo una respuesta", dijo este miércoles a radio Cooperativa.
Herberg explicó que realizará una exposición con el material el 23 y 24 de marzo en Salamanca (España), para luego terminar con la quema de las copias y el entierro de las cenizas y las cintas originales en el Cementerio de Arte de Morille.
Mediante una carta abierta, los directores del Museo de la Memoria y la Cineteca Nacional de Chile rechazaron la iniciativa por "hacer desaparecer nuestra memoria visual", y cuestionaron la autoría de Herberg sobre las imágenes.
Las imágenes "corresponden a filmes de los directores alemanes Walter Heynowski y Gerhard Scheumann, cuyo camarógrafo fue Peter Hellmich, (...) y se encuentran en diversos archivos en Chile y en Alemania", señalaron.
Según los responsables de los archivos chilenos, "Herberg estuvo solamente en las filmaciones de 1974, como traductor, no como camarógrafo, (...) y en 1975, un juicio en Roma dictaminó que el Sr. Herberg no tenía ninguna propiedad o autoría sobre entrevistas e imágenes de ese filme".
Por su parte, el cineasta español acusó a los directores alemanes de "apoderarse" de su trabajo, y aseguró que existen dos versiones del material audiovisual registrado con derechos de explotación distintos.
Sin embargo, el director del Museo de la Memoria y de los Derechos Humanos, Ricardo Brodsky, manifestó "la disposición" del museo "a resguardar sus archivos fílmicos", siempre que las imágenes sean inéditas e instó a Herberg a entregarlas.
El cineasta español mantuvo su disposición a quemar los archivos, y aseguró que su única intención es luchar para preservar la memoria histórica de Chile.
