En una declaración conjunta, los tres países llamaron a la milicia fundamentalista talibán a participar lo antes posible en el proceso de paz.
Uno de los temas centrales de la conferencia fue la situación de seguridad en Afganistán, donde los talibanes han recuperado terreno y actualmente controlan alrededor del 13 por ciento del territorio nacional.
Afganistán y Estados Unidos acusan a Pakistán de apoyar a los talibanes, desestabilizando de esta manera al Gobierno afgano y los esfuerzos internacionales de reconstrucción.
Según medios periodísticos, el ministro chino de Relaciones Exteriores, Wang Yi, afirmó que Pekín pretende mejorar las relaciones entre Afganistán y Pakistán, y subrayó que esto va en interés de los pueblos de los dos países y también de la región.
Las conversaciones en Pekín fueron un nuevo intento de buscar no solo soluciones regionales a la guerra con los talibanes sino también una respuesta a la amenaza que representa la milicia terrorista Estado Islámico (EI). Las conferencias anteriores, en las que también participaba Estados Unidos, terminaron este año en un fracaso.
Pakistán y China son aliados tradicionales. Sin embargo, China también mantiene buenas relaciones con Afganistán, inmerso en un prolongado conflicto diplomático con su vecino Pakistán. El ministro chino de Exteriores pidió que Afganistán participe en el proyecto de crear un corredor económico entre China y Pakistán.
Uno de los temas centrales de la conferencia fue la situación de seguridad en Afganistán, donde los talibanes han recuperado terreno y actualmente controlan alrededor del 13 por ciento del territorio nacional.
Afganistán y Estados Unidos acusan a Pakistán de apoyar a los talibanes, desestabilizando de esta manera al Gobierno afgano y los esfuerzos internacionales de reconstrucción.
Según medios periodísticos, el ministro chino de Relaciones Exteriores, Wang Yi, afirmó que Pekín pretende mejorar las relaciones entre Afganistán y Pakistán, y subrayó que esto va en interés de los pueblos de los dos países y también de la región.
Las conversaciones en Pekín fueron un nuevo intento de buscar no solo soluciones regionales a la guerra con los talibanes sino también una respuesta a la amenaza que representa la milicia terrorista Estado Islámico (EI). Las conferencias anteriores, en las que también participaba Estados Unidos, terminaron este año en un fracaso.
Pakistán y China son aliados tradicionales. Sin embargo, China también mantiene buenas relaciones con Afganistán, inmerso en un prolongado conflicto diplomático con su vecino Pakistán. El ministro chino de Exteriores pidió que Afganistán participe en el proyecto de crear un corredor económico entre China y Pakistán.