Según se espera, la cumbre se centrará en torno a la estrategia para superar las discrepancias entre los musulmanes de diferentes países. De momento, se desconoce la lista definitiva de los participantes y tampoco se ha anunciado la decisión de Teherán con respecto a la invitación.
Las relaciones entre Irán y Arabia Saudí se deterioraron después de que el Gobierno saudita enviara en marzo de 2011 un contingente militar a Bahréin con el propósito de velar por la seguridad ante una profunda crisis política en el país vecino lo que Irán calificó de injerencia en los asuntos internos de Bahréin.
Las relaciones bilaterales se agravaron más aún cuando un oriundo iraní fue acusado de preparar un atentado contra el embajador saudita en Washington.