Maryam al Jawaya, codirectora del Gulf Center for Human Rights, fue detenida el 30 de agosto al llegar al aeropuerto de Manama, acusada de agredir a un agente de policía.
Maryam quería visitar a su padre, que cumple cadena perpetua desde 2011 por complot contra el régimen, y observa una huelga de hambre desde el 25 de agosto.
El opositor chiita, de 54 años, ya mantuvo una huelga de hambre de 110 días en 2012 que le provocó un deterioro de la salud. Entonces recibió el apoyo de muchas organizaciones de defensa de los derechos humanos, que le consideran un "preso de conciencia".
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos había denunciado el viernes que en Bahréin se siga violando la libertad de expresión, y pidió la liberación inmediata de Maryam al Jawaya.
"Instamos al gobierno a que tome medidas inmediatas para liberar a la señora Jawaya y a todos los defensores de los derechos humanos e individuos detenidos por el ejercicio pacífico de sus derechos", dijo la portavoz de esta agencia de la ONU, Ravina Shamdasani, en un comunicado.
Este pequeño país del Golfo, dirigido por la dinastía sunita de los Al Jalifa, se enfrenta desde hace tres años a un movimiento de protesta fomentado por la mayoría chiita, que reclama una monarquía constitucional.