La noche anterior, doce policías y varios manifestantes recibieron heridas por los impactos de piedras y botellas que arrojaron a los izquierdistas miembros del neonazi Partido Nacional Democrático (NPD).
El ministro del Interior de Hamburgo, Christoph Ahlhaus, se quejó del "enorme potencial de violencia" de las protestas.
Un policía disparó al aire para advertir a un grupo de 30 violentos que se dirigían hacia los agentes pertrechados con barras de hierro y bates de madera. "Gracias a dios que fue solo un disparo de advertencia", dijo el oficial de policia Peter Born, y agregó que las consecuencias para la ciudad habrían sido inimaginables si la situación hubiera escalado aún más.
Manifestaciones similares tuvieron lugar el sábado en otras ciudades de Alemania. En Hannover, unas 3.000 personas marcharon pacíficamente para protestar contra un acto de 270 miembros del NPD.
En el estado de Turingia, en el territorio de la extinta Alemania comunista, 550 protestaron contra un festival de música ultraderechista que había congregado a unos 370 seguidores del NPD en la localidad de Poessneck.
Los actos de la ultraderecha se producen en momentos en que se ha reavivado el debate a favor de prohibir el NPD. En 2003 fracasó un intento de hacerlo al salir a la luz que altos cuadros de la organización habían trabajado como agentes encubiertos o informantes de los servicios de inteligencia.
El ministro del Interior de Hamburgo, Christoph Ahlhaus, se quejó del "enorme potencial de violencia" de las protestas.
Un policía disparó al aire para advertir a un grupo de 30 violentos que se dirigían hacia los agentes pertrechados con barras de hierro y bates de madera. "Gracias a dios que fue solo un disparo de advertencia", dijo el oficial de policia Peter Born, y agregó que las consecuencias para la ciudad habrían sido inimaginables si la situación hubiera escalado aún más.
Manifestaciones similares tuvieron lugar el sábado en otras ciudades de Alemania. En Hannover, unas 3.000 personas marcharon pacíficamente para protestar contra un acto de 270 miembros del NPD.
En el estado de Turingia, en el territorio de la extinta Alemania comunista, 550 protestaron contra un festival de música ultraderechista que había congregado a unos 370 seguidores del NPD en la localidad de Poessneck.
Los actos de la ultraderecha se producen en momentos en que se ha reavivado el debate a favor de prohibir el NPD. En 2003 fracasó un intento de hacerlo al salir a la luz que altos cuadros de la organización habían trabajado como agentes encubiertos o informantes de los servicios de inteligencia.