Así comienza: “Del mar los vieron llegar / mis hermanos emplumados / eran los hombres barbados / de la profecía esperada / se oyó la voz del monarca / de que el dios había llegado / y les abrimos las puertas por temor a lo ignorado. ¿Qué causó este desastre?
Tenochtitlán cayó en poder de los conquistadores españoles al mando de Hernán Cortés, después de dos años de importantes intentos militares, políticos y conspirativos, en los que participaron junto con los españoles, los pueblos previamente avasallados. En la portada la llegada de Hernán Cortés a Veracruz según el artista mexicano Diego Rivera (1886-1957). En el año 1519, cuando las fuerzas lideradas por el español Hernán Cortés llegaron a lo que hoy es México, se estimó que la población nativa era de 25 millones de personas. Cien años después, tras la guerra contra los españoles y una serie de epidemias arrasadoras, sus números habían caído hasta el millón. El colapso que sufrió la civilización azteca durante el siglo XVI es una de las mayores catástrofes demográficas, con uno de los índices de mortalidad más alto de la historia. En porcentajes, ninguna peste europea la iguala.
Científicos anunciaron en 2017 haber dado con una posible causa de la epidemia que hace 500 años mató a 15 millones de personas en México, al atribuirla a una fiebre entérica (o tifoidea). En 1545, en las postrimerías del Imperio azteca, muchas personas empezaron a presentar una fiebre alta, dolores de cabeza y sangrado de ojos, boca y nariz. Morían en general al cabo de tres o cuatro días. Después de cinco años, la epidemia, conocida como “cocoliztli” (pestilencia) había matado a un 80% de la población estimada.
La viruela en la historia
La viruela era causada por el virus variola que surgió en las poblaciones humanas en torno al año 10 000 a. C. Durante varios siglos, sucesivas epidemias devastaron a la población. Era una enfermedad tan letal que en algunas culturas antiguas estaba prohibido dar nombre a los niños hasta que contrajesen la enfermedad y sobreviviesen a ella Su tasa de mortalidad llegó a ser hasta de un 30 % de los pacientes infectados. En la India se creía que la viruela se debía a la bendición (¿) de la diosa de la viruela Shitalá.
La viruela entre los aztecas
En 1520, apareció entre los aztecas (México) durante el sitio de Tenochtitlán, provocando además la muerte del líder azteca Cuitláhuac. Entre los incas (desde Colombia hasta el sur de Chile), la viruela acabó con el monarca Huayna Capac, provocó la guerra civil previa a la aparición hispana y causó un desastre demográfico en el Tahuantinsuyo, que antes de la llegada de los españoles contaba con 14 millones de habitantes, mientras hacia el siglo XVIII contaba con apenas 1,5 millones. En Chile, detuvo el avance de los mapuches tras la muerte de Valdivia.
Francisco de Erguía, la bomba biológica
El lunes 5 de marzo de 1520, (luna llena), una pequeña flotilla española al mando de Pánfilo de Narváez abandonó Cuba para dirigirse a la Nueva España (México) Las naves transportaban caballos, armas, y 900 soldados españoles.
Pero lo que nadie había previsto es que uno de estos oficiales traía consigo un arma mucho más letal que toda la caballería y el armamento que transportaban esas naos. Cuando las naves desembarcaron en Zempoala, Veracruz, traían consigo, una bomba biológica cuyo nombre era Francisco de Erguía, quien transportaba dentro de su cuerpo billones de células que contenían el virus de la viruela negra Eguía estaba enfermo de viruela, una mortífera enfermedad que ya había hecho estragos en el Viejo Continente y para la que los oriundos de América carecían de defensas naturales. En cuanto Francisco desembarcó en México, el virus empezó a multiplicarse en el interior de su cuerpo, y acabó de brotar sobre su piel en un terrible sarpullido.
Cocoliztli (Salmonella)
Si bien la viruela hizo estragos, la Cocoliztli (Salmonella) fue peor
Entre 1545 y 1576 desataron una serie de epidemias que acabaron con la vida de entre 7 y 17 millones de personas. Recibieron el nombre de ‘cocoliztli’ (‘peste’ en Nahuatl, el idioma de los aztecas
Francisco Hernández (1514 1587) Doctor de Cámara de Felipe II:
“Las fiebres eran contagiosas, abrasadoras y continuas, más todas pestilentes y, en gran parte letales. La lengua seca y negra. Sed intensa, orina de color verde marino, verde (vegetal) y negro, más de cuando en cuando pasando de la coloración verdosa a la pálida. Pulsos frecuentes y rápidos, más pequeños y débiles; de vez en cuando hasta nulos. Los ojos y todo el cuerpo amarillos. Seguía delirio y convulsión, postemas detrás de una o ambas orejas, y tumor duro y doloroso, dolor de corazón, pecho y vientre, temblor y gran angustia y disenterías; la sangre, que salía al cortar una vena, era de color verde o muy pálido, seca y sin ninguna serosidad. Algunas gangrenas y esfacelos invadían los labios, las partes pudendas y otras regiones del cuerpo con miembros putrefactos, y les manaba sangre de los oídos”.
Los testigos presenciales concuerdan con Hernández al señalar que los indígenas fueron los más afectados “por su temperatura, por su desnudez, por su inercia”. Se insistió en que los influjos astrales eran determinantes, específicamente la conjunción de Marte y Saturno que, tal como se afirma en Europa, ejercían efectos más malévolos dada su constitución “melancólica y miserable, fría y seca…”(¿) Se mencionó como causantes a planetas y cometas, a la ira divina que quiso tornar venganza de la idolatría, a la complexión de los indígenas y aún a sus costumbres. También se habló del prolongado calor estival y de la falta de lluvias desde los años precedentes, así como de los cambios bruscos de frío excesivo a calor excesivo en un corto lapso.
¿Que se sabe hoy?
Los científicos saben ahora que en el momento en que la terrible epidemia «cocolitzli» sacudía a la población indígena, una bacteria intestinal probablemente proveniente de Europa estaba circulando entre la población. Los científicos extrajeron el ADN del interior de los dientes de 29 fallecidos, recurriendo a técnicas de secuenciación masiva (de la llamada metagenómica). Usaron una nueva metodología de procesamiento de datos genéticos, llamada MALT, y así pudieron identificar los patógenos presentes sin previamente saber qué debían buscar, es decir, sin usar sondas («llaves») concretas.
La culpable fue la salmonella entérica
Un nuevo estudio señala que la causante de tanta muerte pudo ser la salmonella, en concreto una cepa de ‘Salmonella entérica ‘ conocida como Paratyphi C. Esta bacteria se transmite mediante la materia fecal, y un pequeño porcentaje de las personas infectadas puede portar la bacteria sin desarrollar salmonelosis, así que los españoles pudieron haber llevado la infección hasta los aztecas, que carecían de resistencias naturales para la enfermedad. Unas condiciones sanitarias deficientes, a causa del colapso social y urbano por la guerra contra los españoles, habrían hecho el resto.
“Para determinar qué patógeno pudo diezmar a la población nativa de la región, investigadores del Instituto para la Ciencia de la Historia Humana extrajeron y secuenciaron ADN de 29 personas enterradas en Oaxaca, al sur de México. Todas menos cinco estaban relacionadas con el brote de ‘cocoliztli’ que tuvo lugar de 1545 a 1550. Los fragmentos de ADN bacteriano centenario de varios de los cuerpos correspondían con el de la Salmonella, según la comparativa hecha con más de 2.700 genomas de bacterias actuales. Una secuenciación más detallada de fragmentos cortos lograron reconstruir dos genomas de la cepa de Salmonella entérica Paratyphi C, un patógeno que causa síntomas similares a los del tifus, que se encuentra principalmente en los países en vías de desarrollo y que si no recibe tratamiento causa la muerte den entre el 10 y el 15% de las personas infectadas”.
La salmonella hoy
Salmonella ¿Cómo saber si estamos infectados?
¿Donde está la salmonella?
Las salmonellas están muy presentes en animales domésticos y salvajes. Son prevalentes en animales comestibles como las aves de corral, los porcinos y vacunos, y también en mascotas, como gatos, perros, pájaros y reptiles como las tortugas. Las salmonellas pueden atravesar toda la cadena alimentaria, desde los piensos para animales y la producción primaria hasta los hogares o los establecimientos e instituciones de servicios de comidas. Por lo general, las personas contraen la salmonelosis a través del consumo de alimentos contaminados de origen animal (principalmente huevos, carne, aves de corral y leche), aunque también hay otros alimentos que se han vinculado a la transmisión, como por ejemplo las hortalizas contaminadas por estiércol. Además, se pueden producir casos cuando las personas entran en contacto con animales infectados, incluidas las mascotas. A menudo, esos animales no presentan signos de enfermedad. También pueden transmitirse entre las personas por vía fecal-oral.
Salmonella – rápida introducción
Una digresión
Hace años no se hablaba tanto de intoxicados por salmonella en Uruguay, la referencia más conocida fue cuando una confitería montevideana fue clausurada en 1995 por contaminación de la mayonesa, seguramente casera que usaba para elaborar sus productos. Antes nunca habíamos sufrido estos brotes. De chicos, la mayonesa era casera: nos comíamos hasta la cascara de los huevos y nada. Resulta obvio que las cosas cambiaron, no solo en Uruguay sino en el mundo.
Durante muchos años en Buenos Aires y algunos meses en Brasil trabaje en la industria alimenticia, más concretamente la producción de Snack. Siempre habia escuchado por boca a de las madres que a los chicos, los chizitos y similares les provocaban dolor de barriga. Siendo parte de una leyenda urbana no le di importancia hasta que en un embarque de “Chizitos” al mercado uruguayo, ya estibado en el camión, se me ocurrió hacerlo pasar por el laboratorio, donde se le hizo un cultivo microbiológico, determinando que estaba contaminado con Escherichia coli, bacteria que vive en el intestino, la mayoría de las veces no causa problemas, en otras puede causar insuficiencia renal e incluso la muerte. Después de un exhaustivo revisión de los procesos, donde sabía que estaba todo bien, llegamos a la conclusión que hubo contaminación por falta de higiene de un empleado, al no lavarse las manos a la salida de la zona de los escusados (wáter). De ahí en más, antes de entrar nuevamente a la zona de producción, quienes hacían uso de los baños debían lavarse las manos en lavatorios puestos a ese fin, no hacerlo le significaba un dia de suspensión. La pregunta era: ¿cómo un producto extrusado de maíz, que atraviesa temperaturas de 150 º podía estar contaminado? La realidad fue que la limpieza de la cinta trasportadora durante la producción, la hacía un operario, y debido a su falta de asepsia en las manos contamino la misma
La madres tenian razón
Un semirremolque entero de 30 m/cub. Estaba contaminado en apenas 24 hs. Mi consejo es que no consuman productos que no pasaron por un proceso de calor intenso, como horneado o fritos, aun así el caso que les comento arriba como un descuido en las normas, sigue siendo probable. Imaginen las posibilidades que tiene de pescarse cualquier “entripado” consumiendo productos en la vía pública, donde las normas de asepsia, así como el lavado de los utensilios o la higiene personal están ausentes por los motivos que sea (falta de baños, de agua potable en cantidad, de repasadores limpios, etc…) Esto no significa que sea una condición generalizada, simplemente se recomienda exigir y no descuidarse.
En Buenos Aires
Alguna vez he visto como refrigeraban la ristra de chorizos crudos de algunos puestos callejeros en la zona de los carritos de Aeroparque metropolitano, poniéndolos a remojo en el rio, donde se evacuaban varios caños maestros de la ciudad ¡Se imaginan! Alguien me decia a manera de broma que la mejor hora para comer un sándwich de Bondiola en la misma zona de los carritos callejeros, era a partir las dos de la tarde, acotándome que ya tenía un par de horas de quita y pon en la parrilla para recalentarlo, motivo por el cual era improbable intoxicarse.
¿Cómo puedo reducir la posibilidad de contraer una infección por Salmonella?
Considere comprar y usar huevos y productos hechos con huevos pasteurizados, que son fáciles de adquirir. Mantenga los huevos refrigerados a temperaturas de 40 °F (4 °C) o más frías en todo momento. Compre huevos solo de tiendas y otros proveedores que los mantengan refrigerados. Deseche los huevos sucios o rotos. Cocine los huevos hasta que la yema y la clara estén firmes. Los platos hechos con huevos deben cocinarse a una temperatura interna de 160 °F (71 °C) o más. Asegúrese de que los alimentos que contengan huevos crudos o poco cocidos, como la mayonesa, los aderezos para ensaladas tipo César y el postre tiramisú, estén hechos solo con huevos pasteurizados.
Tenochtitlán cayó en poder de los conquistadores españoles al mando de Hernán Cortés, después de dos años de importantes intentos militares, políticos y conspirativos, en los que participaron junto con los españoles, los pueblos previamente avasallados. En la portada la llegada de Hernán Cortés a Veracruz según el artista mexicano Diego Rivera (1886-1957). En el año 1519, cuando las fuerzas lideradas por el español Hernán Cortés llegaron a lo que hoy es México, se estimó que la población nativa era de 25 millones de personas. Cien años después, tras la guerra contra los españoles y una serie de epidemias arrasadoras, sus números habían caído hasta el millón. El colapso que sufrió la civilización azteca durante el siglo XVI es una de las mayores catástrofes demográficas, con uno de los índices de mortalidad más alto de la historia. En porcentajes, ninguna peste europea la iguala.
Científicos anunciaron en 2017 haber dado con una posible causa de la epidemia que hace 500 años mató a 15 millones de personas en México, al atribuirla a una fiebre entérica (o tifoidea). En 1545, en las postrimerías del Imperio azteca, muchas personas empezaron a presentar una fiebre alta, dolores de cabeza y sangrado de ojos, boca y nariz. Morían en general al cabo de tres o cuatro días. Después de cinco años, la epidemia, conocida como “cocoliztli” (pestilencia) había matado a un 80% de la población estimada.
La viruela en la historia
La viruela era causada por el virus variola que surgió en las poblaciones humanas en torno al año 10 000 a. C. Durante varios siglos, sucesivas epidemias devastaron a la población. Era una enfermedad tan letal que en algunas culturas antiguas estaba prohibido dar nombre a los niños hasta que contrajesen la enfermedad y sobreviviesen a ella Su tasa de mortalidad llegó a ser hasta de un 30 % de los pacientes infectados. En la India se creía que la viruela se debía a la bendición (¿) de la diosa de la viruela Shitalá.
La viruela entre los aztecas
En 1520, apareció entre los aztecas (México) durante el sitio de Tenochtitlán, provocando además la muerte del líder azteca Cuitláhuac. Entre los incas (desde Colombia hasta el sur de Chile), la viruela acabó con el monarca Huayna Capac, provocó la guerra civil previa a la aparición hispana y causó un desastre demográfico en el Tahuantinsuyo, que antes de la llegada de los españoles contaba con 14 millones de habitantes, mientras hacia el siglo XVIII contaba con apenas 1,5 millones. En Chile, detuvo el avance de los mapuches tras la muerte de Valdivia.
Francisco de Erguía, la bomba biológica
El lunes 5 de marzo de 1520, (luna llena), una pequeña flotilla española al mando de Pánfilo de Narváez abandonó Cuba para dirigirse a la Nueva España (México) Las naves transportaban caballos, armas, y 900 soldados españoles.
Pero lo que nadie había previsto es que uno de estos oficiales traía consigo un arma mucho más letal que toda la caballería y el armamento que transportaban esas naos. Cuando las naves desembarcaron en Zempoala, Veracruz, traían consigo, una bomba biológica cuyo nombre era Francisco de Erguía, quien transportaba dentro de su cuerpo billones de células que contenían el virus de la viruela negra Eguía estaba enfermo de viruela, una mortífera enfermedad que ya había hecho estragos en el Viejo Continente y para la que los oriundos de América carecían de defensas naturales. En cuanto Francisco desembarcó en México, el virus empezó a multiplicarse en el interior de su cuerpo, y acabó de brotar sobre su piel en un terrible sarpullido.
Cocoliztli (Salmonella)
Si bien la viruela hizo estragos, la Cocoliztli (Salmonella) fue peor
Entre 1545 y 1576 desataron una serie de epidemias que acabaron con la vida de entre 7 y 17 millones de personas. Recibieron el nombre de ‘cocoliztli’ (‘peste’ en Nahuatl, el idioma de los aztecas
Francisco Hernández (1514 1587) Doctor de Cámara de Felipe II:
“Las fiebres eran contagiosas, abrasadoras y continuas, más todas pestilentes y, en gran parte letales. La lengua seca y negra. Sed intensa, orina de color verde marino, verde (vegetal) y negro, más de cuando en cuando pasando de la coloración verdosa a la pálida. Pulsos frecuentes y rápidos, más pequeños y débiles; de vez en cuando hasta nulos. Los ojos y todo el cuerpo amarillos. Seguía delirio y convulsión, postemas detrás de una o ambas orejas, y tumor duro y doloroso, dolor de corazón, pecho y vientre, temblor y gran angustia y disenterías; la sangre, que salía al cortar una vena, era de color verde o muy pálido, seca y sin ninguna serosidad. Algunas gangrenas y esfacelos invadían los labios, las partes pudendas y otras regiones del cuerpo con miembros putrefactos, y les manaba sangre de los oídos”.
Los testigos presenciales concuerdan con Hernández al señalar que los indígenas fueron los más afectados “por su temperatura, por su desnudez, por su inercia”. Se insistió en que los influjos astrales eran determinantes, específicamente la conjunción de Marte y Saturno que, tal como se afirma en Europa, ejercían efectos más malévolos dada su constitución “melancólica y miserable, fría y seca…”(¿) Se mencionó como causantes a planetas y cometas, a la ira divina que quiso tornar venganza de la idolatría, a la complexión de los indígenas y aún a sus costumbres. También se habló del prolongado calor estival y de la falta de lluvias desde los años precedentes, así como de los cambios bruscos de frío excesivo a calor excesivo en un corto lapso.
¿Que se sabe hoy?
Los científicos saben ahora que en el momento en que la terrible epidemia «cocolitzli» sacudía a la población indígena, una bacteria intestinal probablemente proveniente de Europa estaba circulando entre la población. Los científicos extrajeron el ADN del interior de los dientes de 29 fallecidos, recurriendo a técnicas de secuenciación masiva (de la llamada metagenómica). Usaron una nueva metodología de procesamiento de datos genéticos, llamada MALT, y así pudieron identificar los patógenos presentes sin previamente saber qué debían buscar, es decir, sin usar sondas («llaves») concretas.
La culpable fue la salmonella entérica
Un nuevo estudio señala que la causante de tanta muerte pudo ser la salmonella, en concreto una cepa de ‘Salmonella entérica ‘ conocida como Paratyphi C. Esta bacteria se transmite mediante la materia fecal, y un pequeño porcentaje de las personas infectadas puede portar la bacteria sin desarrollar salmonelosis, así que los españoles pudieron haber llevado la infección hasta los aztecas, que carecían de resistencias naturales para la enfermedad. Unas condiciones sanitarias deficientes, a causa del colapso social y urbano por la guerra contra los españoles, habrían hecho el resto.
“Para determinar qué patógeno pudo diezmar a la población nativa de la región, investigadores del Instituto para la Ciencia de la Historia Humana extrajeron y secuenciaron ADN de 29 personas enterradas en Oaxaca, al sur de México. Todas menos cinco estaban relacionadas con el brote de ‘cocoliztli’ que tuvo lugar de 1545 a 1550. Los fragmentos de ADN bacteriano centenario de varios de los cuerpos correspondían con el de la Salmonella, según la comparativa hecha con más de 2.700 genomas de bacterias actuales. Una secuenciación más detallada de fragmentos cortos lograron reconstruir dos genomas de la cepa de Salmonella entérica Paratyphi C, un patógeno que causa síntomas similares a los del tifus, que se encuentra principalmente en los países en vías de desarrollo y que si no recibe tratamiento causa la muerte den entre el 10 y el 15% de las personas infectadas”.
La salmonella hoy
Salmonella ¿Cómo saber si estamos infectados?
¿Donde está la salmonella?
Las salmonellas están muy presentes en animales domésticos y salvajes. Son prevalentes en animales comestibles como las aves de corral, los porcinos y vacunos, y también en mascotas, como gatos, perros, pájaros y reptiles como las tortugas. Las salmonellas pueden atravesar toda la cadena alimentaria, desde los piensos para animales y la producción primaria hasta los hogares o los establecimientos e instituciones de servicios de comidas. Por lo general, las personas contraen la salmonelosis a través del consumo de alimentos contaminados de origen animal (principalmente huevos, carne, aves de corral y leche), aunque también hay otros alimentos que se han vinculado a la transmisión, como por ejemplo las hortalizas contaminadas por estiércol. Además, se pueden producir casos cuando las personas entran en contacto con animales infectados, incluidas las mascotas. A menudo, esos animales no presentan signos de enfermedad. También pueden transmitirse entre las personas por vía fecal-oral.
Salmonella – rápida introducción
Una digresión
Hace años no se hablaba tanto de intoxicados por salmonella en Uruguay, la referencia más conocida fue cuando una confitería montevideana fue clausurada en 1995 por contaminación de la mayonesa, seguramente casera que usaba para elaborar sus productos. Antes nunca habíamos sufrido estos brotes. De chicos, la mayonesa era casera: nos comíamos hasta la cascara de los huevos y nada. Resulta obvio que las cosas cambiaron, no solo en Uruguay sino en el mundo.
Durante muchos años en Buenos Aires y algunos meses en Brasil trabaje en la industria alimenticia, más concretamente la producción de Snack. Siempre habia escuchado por boca a de las madres que a los chicos, los chizitos y similares les provocaban dolor de barriga. Siendo parte de una leyenda urbana no le di importancia hasta que en un embarque de “Chizitos” al mercado uruguayo, ya estibado en el camión, se me ocurrió hacerlo pasar por el laboratorio, donde se le hizo un cultivo microbiológico, determinando que estaba contaminado con Escherichia coli, bacteria que vive en el intestino, la mayoría de las veces no causa problemas, en otras puede causar insuficiencia renal e incluso la muerte. Después de un exhaustivo revisión de los procesos, donde sabía que estaba todo bien, llegamos a la conclusión que hubo contaminación por falta de higiene de un empleado, al no lavarse las manos a la salida de la zona de los escusados (wáter). De ahí en más, antes de entrar nuevamente a la zona de producción, quienes hacían uso de los baños debían lavarse las manos en lavatorios puestos a ese fin, no hacerlo le significaba un dia de suspensión. La pregunta era: ¿cómo un producto extrusado de maíz, que atraviesa temperaturas de 150 º podía estar contaminado? La realidad fue que la limpieza de la cinta trasportadora durante la producción, la hacía un operario, y debido a su falta de asepsia en las manos contamino la misma
La madres tenian razón
Un semirremolque entero de 30 m/cub. Estaba contaminado en apenas 24 hs. Mi consejo es que no consuman productos que no pasaron por un proceso de calor intenso, como horneado o fritos, aun así el caso que les comento arriba como un descuido en las normas, sigue siendo probable. Imaginen las posibilidades que tiene de pescarse cualquier “entripado” consumiendo productos en la vía pública, donde las normas de asepsia, así como el lavado de los utensilios o la higiene personal están ausentes por los motivos que sea (falta de baños, de agua potable en cantidad, de repasadores limpios, etc…) Esto no significa que sea una condición generalizada, simplemente se recomienda exigir y no descuidarse.
En Buenos Aires
Alguna vez he visto como refrigeraban la ristra de chorizos crudos de algunos puestos callejeros en la zona de los carritos de Aeroparque metropolitano, poniéndolos a remojo en el rio, donde se evacuaban varios caños maestros de la ciudad ¡Se imaginan! Alguien me decia a manera de broma que la mejor hora para comer un sándwich de Bondiola en la misma zona de los carritos callejeros, era a partir las dos de la tarde, acotándome que ya tenía un par de horas de quita y pon en la parrilla para recalentarlo, motivo por el cual era improbable intoxicarse.
¿Cómo puedo reducir la posibilidad de contraer una infección por Salmonella?
Considere comprar y usar huevos y productos hechos con huevos pasteurizados, que son fáciles de adquirir. Mantenga los huevos refrigerados a temperaturas de 40 °F (4 °C) o más frías en todo momento. Compre huevos solo de tiendas y otros proveedores que los mantengan refrigerados. Deseche los huevos sucios o rotos. Cocine los huevos hasta que la yema y la clara estén firmes. Los platos hechos con huevos deben cocinarse a una temperatura interna de 160 °F (71 °C) o más. Asegúrese de que los alimentos que contengan huevos crudos o poco cocidos, como la mayonesa, los aderezos para ensaladas tipo César y el postre tiramisú, estén hechos solo con huevos pasteurizados.