"La mañana de ayer (sábado) se presentaron enfrentamientos entre el ELN y las Autodefensas Gaitanistas en la comunidad Peña Azul, una vereda del municipio del Alto Baudó", dijo a AFP Luis Murillo, defensor regional del selvático Chocó, el departamento más pobre del país.
El funcionario sostuvo que los 304 desplazados hacen parte de 108 familias, en las que hay niños y ancianos, y que ya llegaron a Pie de Pató, cabecera municipal del Alto Baudó, donde reciben atención.
Sin embargo, alertó porque hay otras ocho familias que no pudieron salir de Peña Azul y de las que se desconoce su suerte.
"Nuestra preocupación ahora es por estas personas, que huyeron por la selva y no conocemos su situación", añadió Murillo, quien aseguró que "al parecer" ya hay presencia de la fuerza pública en el lugar y que los combates cesaron.
El defensor indicó que la zona tiene dominio histórico del Ejército de Liberación Nacional (ELN, guevarista), que hace casi un mes instaló diálogos de paz con el gobierno de Juan Manuel Santos.
Pero hace tres años las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), remanentes de las milicias paramilitares desmovilizadas hace una década y brazo armado del Clan del Golfo, principal banda criminal del país, iniciaron una avanzada para tomar control del Alto Baudó, un territorio indígena y afrodescendiente cercano al Pacífico y a otros municipios importantes de la región, explicó.
Desde entonces se han producido desplazamientos masivos de "población vulnerable", especialmente indígenas sin escolarización y que nunca habían salido del medio rural, agregó.
"Es una situación sistemática de violaciones de los derechos humanos", aseguró Murillo, quien aseveró que la Defensoría lleva años alertando sobre esta problemática sin que las autoridades alienten "soluciones de fondo".
Las negociaciones entre Santos y el ELN, con unos 1.500 combatientes según cálculos oficiales, buscan alcanzar la "paz completa", tras la firma en noviembre de un acuerdo con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas), principal y más antigua guerrilla del país.
Colombia llora 220.000 muertos, 60.000 desaparecidos y 6,9 millones de desplazados por un conflicto armado de más de medio siglo que ha enfrentado a guerrillas, paramilitares y agentes estatales.
El funcionario sostuvo que los 304 desplazados hacen parte de 108 familias, en las que hay niños y ancianos, y que ya llegaron a Pie de Pató, cabecera municipal del Alto Baudó, donde reciben atención.
Sin embargo, alertó porque hay otras ocho familias que no pudieron salir de Peña Azul y de las que se desconoce su suerte.
"Nuestra preocupación ahora es por estas personas, que huyeron por la selva y no conocemos su situación", añadió Murillo, quien aseguró que "al parecer" ya hay presencia de la fuerza pública en el lugar y que los combates cesaron.
El defensor indicó que la zona tiene dominio histórico del Ejército de Liberación Nacional (ELN, guevarista), que hace casi un mes instaló diálogos de paz con el gobierno de Juan Manuel Santos.
Pero hace tres años las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), remanentes de las milicias paramilitares desmovilizadas hace una década y brazo armado del Clan del Golfo, principal banda criminal del país, iniciaron una avanzada para tomar control del Alto Baudó, un territorio indígena y afrodescendiente cercano al Pacífico y a otros municipios importantes de la región, explicó.
Desde entonces se han producido desplazamientos masivos de "población vulnerable", especialmente indígenas sin escolarización y que nunca habían salido del medio rural, agregó.
"Es una situación sistemática de violaciones de los derechos humanos", aseguró Murillo, quien aseveró que la Defensoría lleva años alertando sobre esta problemática sin que las autoridades alienten "soluciones de fondo".
Las negociaciones entre Santos y el ELN, con unos 1.500 combatientes según cálculos oficiales, buscan alcanzar la "paz completa", tras la firma en noviembre de un acuerdo con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas), principal y más antigua guerrilla del país.
Colombia llora 220.000 muertos, 60.000 desaparecidos y 6,9 millones de desplazados por un conflicto armado de más de medio siglo que ha enfrentado a guerrillas, paramilitares y agentes estatales.