Se trata de la primera película que rueda Guerra tras haber llevado a Colombia hasta los Oscar con “El abrazo de la serpiente” y en esta ocasión ha codirigido con la hasta ahora su productora, Gallego, además su pareja.
“Pájaros de verano” se inspira en hechos reales y traslada al espectador hasta la desértica región de La Guajira, donde a fines de los años 60 unos indígenas de la etnia wayuu comienzan a comerciar con la marihuana que unos estadounidenses andaban buscando. Eran miembros de los “Peace Corps”, que luchaban contra el comunismo.
En un país marcado a sangre y fuego por el narcotráfico como es Colombia, a Gallego le parecía importante cómo muchos empezaron en este negocio de forma inocente. “Lo ves como normal porque estás en una región fronteriza”, dijo la realizadora durante un encuentro con el público al término de la proyección, que inaugura la Quincena de los Realizadores, una sección paralela al Festival de Cannes.
Concebida con una gran apuesta estética, la cinta cuenta con un reparto mixto entre actores profesionales y no profesionales. Asimismo, también tiene elementos de cine de género, pero sin llegar a glorificar a los criminales, según quiso precisar Guerra.
“Pájaros de verano” inaugura una Quincena de los Realizadores con amplia presencia de cine en español, distanciándose así de otras secciones del certamen francés en las que el cine rodado en Iberoamérica prácticamente ha sido ignorado.
“Pájaros de verano” se inspira en hechos reales y traslada al espectador hasta la desértica región de La Guajira, donde a fines de los años 60 unos indígenas de la etnia wayuu comienzan a comerciar con la marihuana que unos estadounidenses andaban buscando. Eran miembros de los “Peace Corps”, que luchaban contra el comunismo.
En un país marcado a sangre y fuego por el narcotráfico como es Colombia, a Gallego le parecía importante cómo muchos empezaron en este negocio de forma inocente. “Lo ves como normal porque estás en una región fronteriza”, dijo la realizadora durante un encuentro con el público al término de la proyección, que inaugura la Quincena de los Realizadores, una sección paralela al Festival de Cannes.
Concebida con una gran apuesta estética, la cinta cuenta con un reparto mixto entre actores profesionales y no profesionales. Asimismo, también tiene elementos de cine de género, pero sin llegar a glorificar a los criminales, según quiso precisar Guerra.
“Pájaros de verano” inaugura una Quincena de los Realizadores con amplia presencia de cine en español, distanciándose así de otras secciones del certamen francés en las que el cine rodado en Iberoamérica prácticamente ha sido ignorado.