Un dibujo de Satoshi Kitamura
El japonés intervino en la XXVI Feria Internacional del Libro de Guadalajara (oeste), para presentar su libro más reciente "Igor: El pájaro que no sabía cantar".
"No tengo nada contra la tecnología. Me parece muy interesante, pero he observado cómo algunos colegas que hace unos diez años cambiaron y dejaron el papel por la computadora están regresando, y veo cómo toda una generación de dibujantes que nunca han conocido el papel lo estan usando", dijo.
El ilustrador, de 56 años, no descartó realizar dibujos tipo "manga" como parte de un proceso creativo complementario. "Aún no lo decido, pero me gustaría hacerlo en forma correcta y profesional", expresó.
De formación autodidacta, Satoshi Kitamura no lamenta no ser un artista de academia. "Aunque sí (lamento) no haberme sentado a intercambiar impresiones con otros dibujantes de academia como lo he hecho hace apenas diez años, debí hacerlo antes", opinó.
Radicado desde 1979 en Londres, sus libros realizados en colaboración con la autora infantil Hiawyn Oram, como "Alex quiere ser un dinosaurio", "¿Yo y mi gato" y "Ardilla tiene hambre", se han traducido al español y otros idiomas, con notable éxito de ventas.
En 1983 ganó el Premio Mother Goose, por el libro "Fernando Furioso", que también obtuvo el premio del Libro Ilustrado en Japón.
"No tengo nada contra la tecnología. Me parece muy interesante, pero he observado cómo algunos colegas que hace unos diez años cambiaron y dejaron el papel por la computadora están regresando, y veo cómo toda una generación de dibujantes que nunca han conocido el papel lo estan usando", dijo.
El ilustrador, de 56 años, no descartó realizar dibujos tipo "manga" como parte de un proceso creativo complementario. "Aún no lo decido, pero me gustaría hacerlo en forma correcta y profesional", expresó.
De formación autodidacta, Satoshi Kitamura no lamenta no ser un artista de academia. "Aunque sí (lamento) no haberme sentado a intercambiar impresiones con otros dibujantes de academia como lo he hecho hace apenas diez años, debí hacerlo antes", opinó.
Radicado desde 1979 en Londres, sus libros realizados en colaboración con la autora infantil Hiawyn Oram, como "Alex quiere ser un dinosaurio", "¿Yo y mi gato" y "Ardilla tiene hambre", se han traducido al español y otros idiomas, con notable éxito de ventas.
En 1983 ganó el Premio Mother Goose, por el libro "Fernando Furioso", que también obtuvo el premio del Libro Ilustrado en Japón.