¿Por qué se incrementaron a más de 30 los secuestros durante los primeros dos meses de 2009?, ¿Por qué los reclusos de los diferentes centros de prevención pueden organizar y coordinar secuestros desde el interior de sus celdas? ¿Por qué los reclusos están armados y viviendo con lujos como televisores plasma, computadoras portátiles con Internet, equipos de sonido, y reproductores de dvd? Estas son preguntas que los guatemaltecos se realizan al conocer los resultados de las requisas realizadas por las fuerzas de seguridad en las cárceles del país.
Al parecer, todo eso se debe, según un informe de inteligencia en poder de elPeriódico, a la relación que los directivos de la Dirección General del Sistema Penitenciario (DGSP) tienen con los cabecillas de las bandas de secuestradores ubicados en las diferentes cárceles del país.
intentan facilitar
La primera prueba, según el documento, consiste en la intención de los directivos de la DGSP, Morales y Táger, en trasladar al grupo denominado Los Zetas, quienes son el brazo delictivo del cartel del Golfo, y que se encuentran recluidos por su participación en la narco matanza de Zacapa, al sector 1 del Centro de Detención de la zona 18. El informe cita que por órdenes verbales de Táger y Morales se solicitó el mencionado traslado, por lo que la Guardia de Presidios pidió por escrito la orden. Sin embargo, los directivos de presidios se negaron. El traslado no se llevó a cabo.
El sector 1 del Centro de Detención Preventiva de la zona 18, a donde se pretendía trasladar al grupo Los Zetas, se encuentra anexo al corredor de salida de la cárcel por donde se ingresan los alimentos para los privados de libertad. Debido a la cercanía con las puertas y el tránsito de los camiones de comida por este sector, se intentó el traslado de este grupo de alta peligrosidad la noche del 30 de diciembre de 2008, un día antes de año nuevo.
En esa fecha, Leal Milián solicitó por escrito al encargado del Grupo élite de la DGSP, Eric Barrera Godoy, “su apoyo en el traslado de 13 privados de libertad del denominado grupo Los Zetas. Quienes se encuentran recluidos en la Cárcel de Delitos Menores, Anexo B de la zona 18, hacia el Centro de Detención Preventiva de la zona 18. Específicamente al sector 1”. También argumentaron al presidente Álvaro Colom que todo se trataba de una requisa.
Esta solicitud se encuentra contenida en el oficio número 3032-2008. El documento también cita que “dicho traslado se hace en coordinación y por órdenes del Lic. Eduardo Julio Táger Rosado, sub director del Sistema Penitenciario por medidas de seguridad”. El oficio contiene adjunto el listado de los reos que pretendían trasladar.
En una carta dirigida a Morales en la fecha mencionada, uno de los asesores en seguridad de Presidios advirtió que “debido a la inminente amenaza de intento de rescate o fuga del grupo Los Zetas, se tiene conocimiento que estarían reclutando algunos agentes de la Policía Nacional Civil”.
Esta correspondencia también cita que “el director del Centro Preventivo de la zona 18, Joaquín Adolfo Leal Milián, se tiene conocimiento que está facilitando el ingreso de drogas y licor a los diferentes sectores del penal.
Este traslado se efectuó, durante la segunda quincena de diciembre, para que los líderes de las bandas delictivas no pudieran coordinar secuestros y asaltos.
El documento cita que entre los reos trasladados hacia la cárcel de máxima seguridad de El Infiernito están: Rigoberto Morales Barrientos, alias Rigorrico, Elgidio Danilo Ovalle Pérez, alias El Teniente, Ronald Raxcacoj Reyes, Mario Arreaza, Carlos Amílcar González Díaz y Jorge Raúl Calderón Herrera, alias El Chompipe, todos procesados por secuestro, asesinato y extorsión.
Según el Oficio número 016/DASD/op/2008, con fecha 19 de diciembre de 2008, dirigido hacia el Director de Presidios, durante la permanencia de los reos mencionados en la cárcel de El Infiernito, las fuerzas de seguridad lograron desarticular 12 bandas de secuestradores debido a que los cabecillas de estas se encontraban incomunicados con su grupo operativo, lo que según fuentes de Presidios, resultaba en un mayor margen de error en su modus operandi.
Sin embargo, a pesar de que se consiguió la captura de los cómplices de estas bandas, en el período en que estos estuvieron recluidos en el sector de máxima seguridad, aproximadamente 20 días después, el director de Presidios, Morales y el subdirector Táger, ordenaron el regreso de los secuestradores de la cárcel de máxima seguridad, ‘El Infiernito’ a las granjas penales donde antes se encontraban.
Esto quedó contenido en el oficio 016/DASD/op/2008. Sin embargo, en este mismo oficio, los asesores de seguridad también le informan a Morales la “suma preocupación” sobre la decisión que los directivos del SP tomaron respecto a devolver a los reos trasladados a El Infiernito hacia sus granjas penales respectivas.
En el oficio también se revela la complicidad de las autoridades de presidios con reos de alta peligrosidad. El punto tres del oficio consigna, por ejemplo, que los directivos de presidios evitaron “el traslado de la Granja Canadá hacia El Infiernito de los siguientes reos: Luis Eduardo Díaz Vásquez, alias Guicho Machetes, Julián González, de nacionalidad colombiana y Alfonso Morales Blanco.
Junto con este documento también se encuentra otro de carácter “confidencial” con sello de recibido por el despacho de Morales y con fecha 14 de octubre de 2008 a las 18:00 horas.
Este documento recomienda la separación de los cabecillas de las bandas de secuestradores de los demás reclusos hacia El Infiernito en Escuintla.
Posteriormente, el 19 de diciembre de 2008, se recomendó a Morales a través de la Providencia número 1561-2008/ARPC-iq y 1537-2008/ARPC-iq que varios de los reos ubicados en El Infiernito permanecieran en ese centro, a lo que lo que el director del SP hizo caso omiso.
Otro traslado fue ordenado por Táger a través del oficio número 1979-2008/ETR, este consiste en el traslado del reo José Romilio Moscoso Lemus desde la Cárcel de Alta Seguridad Canadá, Escuintla, hacia el Centro de Detención Preventiva de los Jocotes, en Zacapa.
Al parecer, todo eso se debe, según un informe de inteligencia en poder de elPeriódico, a la relación que los directivos de la Dirección General del Sistema Penitenciario (DGSP) tienen con los cabecillas de las bandas de secuestradores ubicados en las diferentes cárceles del país.
intentan facilitar
La fuga de “los zetas”
El oficio número 3032-2008 de fecha 30 de diciembre de 2008, revela que tanto el director de presidios y ex capitán del Ejército Eddy Morales, como el subdirector de esa dependencia Eduardo Táger y el director del Centro de detención Preventiva de la zona 18, Joaquín Adolfo Leal Milián, tienen vínculos directos con el trasiego de drogas y armas en la mencionada cárcel.La primera prueba, según el documento, consiste en la intención de los directivos de la DGSP, Morales y Táger, en trasladar al grupo denominado Los Zetas, quienes son el brazo delictivo del cartel del Golfo, y que se encuentran recluidos por su participación en la narco matanza de Zacapa, al sector 1 del Centro de Detención de la zona 18. El informe cita que por órdenes verbales de Táger y Morales se solicitó el mencionado traslado, por lo que la Guardia de Presidios pidió por escrito la orden. Sin embargo, los directivos de presidios se negaron. El traslado no se llevó a cabo.
El sector 1 del Centro de Detención Preventiva de la zona 18, a donde se pretendía trasladar al grupo Los Zetas, se encuentra anexo al corredor de salida de la cárcel por donde se ingresan los alimentos para los privados de libertad. Debido a la cercanía con las puertas y el tránsito de los camiones de comida por este sector, se intentó el traslado de este grupo de alta peligrosidad la noche del 30 de diciembre de 2008, un día antes de año nuevo.
En esa fecha, Leal Milián solicitó por escrito al encargado del Grupo élite de la DGSP, Eric Barrera Godoy, “su apoyo en el traslado de 13 privados de libertad del denominado grupo Los Zetas. Quienes se encuentran recluidos en la Cárcel de Delitos Menores, Anexo B de la zona 18, hacia el Centro de Detención Preventiva de la zona 18. Específicamente al sector 1”. También argumentaron al presidente Álvaro Colom que todo se trataba de una requisa.
Esta solicitud se encuentra contenida en el oficio número 3032-2008. El documento también cita que “dicho traslado se hace en coordinación y por órdenes del Lic. Eduardo Julio Táger Rosado, sub director del Sistema Penitenciario por medidas de seguridad”. El oficio contiene adjunto el listado de los reos que pretendían trasladar.
Intención de fuga
Para el 19 de diciembre de 2008, ya se conocía la intención de la fuga de Los Zetas, esto le fue notificado al Director de Presidios, sin embargo, el sub director continuó con la intención de trasladarlos.En una carta dirigida a Morales en la fecha mencionada, uno de los asesores en seguridad de Presidios advirtió que “debido a la inminente amenaza de intento de rescate o fuga del grupo Los Zetas, se tiene conocimiento que estarían reclutando algunos agentes de la Policía Nacional Civil”.
Esta correspondencia también cita que “el director del Centro Preventivo de la zona 18, Joaquín Adolfo Leal Milián, se tiene conocimiento que está facilitando el ingreso de drogas y licor a los diferentes sectores del penal.
Los traslados de los cabecillas de secuestradores
Según comenta el informe de inteligencia en poder de elPeriódico, de acuerdo con el Plan de Seguridad Nacional, pactado en 2008 entre el Ministerio de Gobernación (Mingob), PNC y el Sistema Penitenciario (SP), los cabecillas de las bandas de secuestradores recluidos en los centros carcelarios fueron trasladados a la cárcel de máxima seguridad de El Infiernito en Escuintla.Este traslado se efectuó, durante la segunda quincena de diciembre, para que los líderes de las bandas delictivas no pudieran coordinar secuestros y asaltos.
El documento cita que entre los reos trasladados hacia la cárcel de máxima seguridad de El Infiernito están: Rigoberto Morales Barrientos, alias Rigorrico, Elgidio Danilo Ovalle Pérez, alias El Teniente, Ronald Raxcacoj Reyes, Mario Arreaza, Carlos Amílcar González Díaz y Jorge Raúl Calderón Herrera, alias El Chompipe, todos procesados por secuestro, asesinato y extorsión.
Según el Oficio número 016/DASD/op/2008, con fecha 19 de diciembre de 2008, dirigido hacia el Director de Presidios, durante la permanencia de los reos mencionados en la cárcel de El Infiernito, las fuerzas de seguridad lograron desarticular 12 bandas de secuestradores debido a que los cabecillas de estas se encontraban incomunicados con su grupo operativo, lo que según fuentes de Presidios, resultaba en un mayor margen de error en su modus operandi.
Sin embargo, a pesar de que se consiguió la captura de los cómplices de estas bandas, en el período en que estos estuvieron recluidos en el sector de máxima seguridad, aproximadamente 20 días después, el director de Presidios, Morales y el subdirector Táger, ordenaron el regreso de los secuestradores de la cárcel de máxima seguridad, ‘El Infiernito’ a las granjas penales donde antes se encontraban.
Esto quedó contenido en el oficio 016/DASD/op/2008. Sin embargo, en este mismo oficio, los asesores de seguridad también le informan a Morales la “suma preocupación” sobre la decisión que los directivos del SP tomaron respecto a devolver a los reos trasladados a El Infiernito hacia sus granjas penales respectivas.
En el oficio también se revela la complicidad de las autoridades de presidios con reos de alta peligrosidad. El punto tres del oficio consigna, por ejemplo, que los directivos de presidios evitaron “el traslado de la Granja Canadá hacia El Infiernito de los siguientes reos: Luis Eduardo Díaz Vásquez, alias Guicho Machetes, Julián González, de nacionalidad colombiana y Alfonso Morales Blanco.
Junto con este documento también se encuentra otro de carácter “confidencial” con sello de recibido por el despacho de Morales y con fecha 14 de octubre de 2008 a las 18:00 horas.
Este documento recomienda la separación de los cabecillas de las bandas de secuestradores de los demás reclusos hacia El Infiernito en Escuintla.
Sacan de cárceles de máxima seguridad a peligrosos reos
Los reos enviados a El Infiernito fueron devueltos a sus respectivas granjas penales por órdenes de Morales y Táger después que el primero a través del memorando número DGSP/28/2008-iacl, de fecha 12 de diciembre de 2008, manifestara que “a partir de la presente fecha, la Dirección y Subdirección General, va a nombrar a los Encargados de Sectores de todos los Centros Preventivos (sic) al igual todo traslado de personal operativo y traslados de reclusos estarán a nuestro cargo”.Posteriormente, el 19 de diciembre de 2008, se recomendó a Morales a través de la Providencia número 1561-2008/ARPC-iq y 1537-2008/ARPC-iq que varios de los reos ubicados en El Infiernito permanecieran en ese centro, a lo que lo que el director del SP hizo caso omiso.
Otro traslado fue ordenado por Táger a través del oficio número 1979-2008/ETR, este consiste en el traslado del reo José Romilio Moscoso Lemus desde la Cárcel de Alta Seguridad Canadá, Escuintla, hacia el Centro de Detención Preventiva de los Jocotes, en Zacapa.