Las fuerzas aéreas egipcias atacaron escondrijos y depósitos de armas utilizados por supuestos milicianos en el Sinaí, según explicó el Ejército.
Los lugares alcanzados esta mañana "eran utilizados por organizaciones terroristas como base para atacar a los cuerpos de seguridad, así como a civiles en el norte y centro del Sinaí", declaró el portavoz.
Fuentes de las fuerzas de seguridad en el norte del Sinaí contaron que la Policía y los soldados estaban barriendo la península tras cerrar todas las salidas para evitar que huyera cualquier sospechoso. Se trata de "la mayor operación" del Ejército en la península hasta el momento, añadieron.
Algunos testigos contaron a dpa que se oyeron explosiones en varias partes del Sinaí.
Los guardas fronterizos y la Policía están endureciéndo las medidas de seguridad en las fronteras, mientras que las fuerzas de seguridad han aumentado su presencia en lo que el Ejército denominó como zonas vitales del país.
Las fuerzas navales también aplicaron estrictas medidas de seguridad en las fronteras marítimas "para cortar las vías de abastecimiento de los grupos terroristas", añadió el Ejército.
En un comunicado previo, el portavoz del Ejército coronel Tamer al Refai animó a los egipcios a cooperar con las autoridades e "informar inmediatamente sobre cualquier grupo que amenace la seguridad y la estabilidad del país".
Egipto lleva combatiendo a los insurgentes en el Sinaí desde 2011, después del derrocamiento del presidente Hosni Mubarak.
Sin embargo, se ha producido un incremento de los ataques de milicias, sobre todo contra las fuerzas de seguridad y la comunidad cristiana, una minoría religiosa en el país, desde que el Ejército derrocó al presidente islamista Mohamed Morsi en 2013.
La mayoría de estos ataques, que tuvieron lugar en el norte del Sinaí junto a la frontera de Israel y la Franja de Gaza, han sido reivindicados por milicianos adscritos a la milicia terrorista Estado Islámico (EI).
En noviembre, el presidente Abdel Fattah al Sissi ordenó al jefe del Estado Mayor, Mohamed Farid Hegazy, usar todas las fuerzas necesarias para acabar con los ataques en la península en tres meses.
La orden llegó tras un ataque de milicianos a una mezquita en el norte del Sinaí el 24 de noviembre que dejó más de 300 muertos, uno de los ataques más mortíferos de la historia del país.
Egipto declaró el estado de emergencia nacional en abril cuando un doble atentado suicida el Domingo de Ramos en dos iglesias cristianas coptas en dos ciudades al norte del Cairo dejó al menos 47 muertos.
Los lugares alcanzados esta mañana "eran utilizados por organizaciones terroristas como base para atacar a los cuerpos de seguridad, así como a civiles en el norte y centro del Sinaí", declaró el portavoz.
Fuentes de las fuerzas de seguridad en el norte del Sinaí contaron que la Policía y los soldados estaban barriendo la península tras cerrar todas las salidas para evitar que huyera cualquier sospechoso. Se trata de "la mayor operación" del Ejército en la península hasta el momento, añadieron.
Algunos testigos contaron a dpa que se oyeron explosiones en varias partes del Sinaí.
Los guardas fronterizos y la Policía están endureciéndo las medidas de seguridad en las fronteras, mientras que las fuerzas de seguridad han aumentado su presencia en lo que el Ejército denominó como zonas vitales del país.
Las fuerzas navales también aplicaron estrictas medidas de seguridad en las fronteras marítimas "para cortar las vías de abastecimiento de los grupos terroristas", añadió el Ejército.
En un comunicado previo, el portavoz del Ejército coronel Tamer al Refai animó a los egipcios a cooperar con las autoridades e "informar inmediatamente sobre cualquier grupo que amenace la seguridad y la estabilidad del país".
Egipto lleva combatiendo a los insurgentes en el Sinaí desde 2011, después del derrocamiento del presidente Hosni Mubarak.
Sin embargo, se ha producido un incremento de los ataques de milicias, sobre todo contra las fuerzas de seguridad y la comunidad cristiana, una minoría religiosa en el país, desde que el Ejército derrocó al presidente islamista Mohamed Morsi en 2013.
La mayoría de estos ataques, que tuvieron lugar en el norte del Sinaí junto a la frontera de Israel y la Franja de Gaza, han sido reivindicados por milicianos adscritos a la milicia terrorista Estado Islámico (EI).
En noviembre, el presidente Abdel Fattah al Sissi ordenó al jefe del Estado Mayor, Mohamed Farid Hegazy, usar todas las fuerzas necesarias para acabar con los ataques en la península en tres meses.
La orden llegó tras un ataque de milicianos a una mezquita en el norte del Sinaí el 24 de noviembre que dejó más de 300 muertos, uno de los ataques más mortíferos de la historia del país.
Egipto declaró el estado de emergencia nacional en abril cuando un doble atentado suicida el Domingo de Ramos en dos iglesias cristianas coptas en dos ciudades al norte del Cairo dejó al menos 47 muertos.