"El Polo Norte quedará expuesto en diez años. Uno podrá navegar en un carguero japonés de automóviles a través del Polo Norte y hacia el Atlántico. El hielo se retirará a una zona al norte de Groenlandia y la isla de Ellesmere para el 2020", dijo Wadhams.
Según el experto, "el cambio en el hielo ártico en el verano será el mayor impacto que el calentamiento global tendrá en la apariencia física del planeta".
Durante todo ese tiempo, hicieron 1.500 agujeros y hallaron que el grosor promedio de los témpanos de hielo era de apenas 1,8 metros. Según dijo Hadow al diario británico The Times, las técnicas de las futuras expediciones al Ártico durante los veranos tendrán que ser modificadas para adaptarse a frecuentes áreas abiertas de agua.
Según el experto, "el cambio en el hielo ártico en el verano será el mayor impacto que el calentamiento global tendrá en la apariencia física del planeta".
Bueno para el transporte, nefasto para el clima
Esta ruta estará libre de hielo durante varios meses al año, lo que permitirá reducir los más de 4.800 kilómetros de recorrido que tienen que hacer los barcos que van del Lejano Oriente a Europa a través del Canal de Suez, agrega el estudio. A largo plazo, la pérdida de esa capa acelerará el calentamiento del planeta, cambiando el comportamiento de la circulación de los océanos y de la atmósfera, lo que tendrá un efecto que aún no se puede clacular debido al aumento de la acidez del agua.Según Wadhams, las próximas expediciones al ártico tendrán que rediseñar sus técnicas porque cada vez habrá más agua
La conclusión está incluida en el estudio que hizo Wadhams, del Polar Ocean Physics Group, tras analizar las medidas de la capa de hielo recogidas por el submarino nuclear británico "HMS Tireless" en 2007 y las tomadas este año por una expedición encabezada por Pen Hadow. Éste, y sus dos compañeros de equipo, Ann Daniels y Martin Hartley, pasaron 73 días entre el 1 de marzo y el 7 de mayo de este año caminando 450 kilómetros en el Ártico mientras tomaban medidas. Durante todo ese tiempo, hicieron 1.500 agujeros y hallaron que el grosor promedio de los témpanos de hielo era de apenas 1,8 metros. Según dijo Hadow al diario británico The Times, las técnicas de las futuras expediciones al Ártico durante los veranos tendrán que ser modificadas para adaptarse a frecuentes áreas abiertas de agua.