El Anchiornis huxleyi vivió en el Jurásico tardío, hace unos 155 millones de años, lo que lo convierte en el dinosaurio con aspecto de pájaro más antiguo conocido y, sobre todo, en lo que algunos paleontólogos han definido como un eslabón perdido entre dinosaurios y aves.
El esqueleto fosilizado del Anchiornis huxleyi se ha hallado en la provincia de Liaoning. Más exactamente han sido dos descubrimientos: los detalles de un primer individuo, procedente de un yacimiento en Yaougou, se publicaron a principios de año en la revista de la Academia de Ciencias de China, mientras que ahora se han presentado nuevos especímenes aparecidos en Tiajishan. El último hallazgo se ha publicado esta semana en la prestigiosa revista Nature, lo que equivale a un bautismo internacional.
Los autores estiman que el animal completo mediría 40 centímetros de largo y pesaría 110 gramos, por lo que se trata del dinosaurio no aviar más pequeño hasta la fecha. Uno de los descubridores, Xing Xu, admite que al principio se pensó que se trataba simplemente de un pájaro antiguo, pero que una evaluación más exhaustiva del fósil –«excepcionalmente bien preservado»– ha revelado que se trata de un ejemplar de la familia de los dinosaurios terópodos manirraptores Troodontidae. Esto sugiere que «pudo haber existido una fase en la que los dinosaurios tuvieron cuatro alas en su transición para convertirse en aves».
La conclusión principal del equipo científico que ha llevado a cabo los análisis de la nueva especie es realmente contundente: ha quedado totalmente rebatido el argumento que defendían algunos expertos de que los dinosaurios con aspecto de ave vivieron demasiado tarde como para ser los antepasados de los pájaros.
El esqueleto fosilizado del Anchiornis huxleyi se ha hallado en la provincia de Liaoning. Más exactamente han sido dos descubrimientos: los detalles de un primer individuo, procedente de un yacimiento en Yaougou, se publicaron a principios de año en la revista de la Academia de Ciencias de China, mientras que ahora se han presentado nuevos especímenes aparecidos en Tiajishan. El último hallazgo se ha publicado esta semana en la prestigiosa revista Nature, lo que equivale a un bautismo internacional.
Los autores estiman que el animal completo mediría 40 centímetros de largo y pesaría 110 gramos, por lo que se trata del dinosaurio no aviar más pequeño hasta la fecha. Uno de los descubridores, Xing Xu, admite que al principio se pensó que se trataba simplemente de un pájaro antiguo, pero que una evaluación más exhaustiva del fósil –«excepcionalmente bien preservado»– ha revelado que se trata de un ejemplar de la familia de los dinosaurios terópodos manirraptores Troodontidae. Esto sugiere que «pudo haber existido una fase en la que los dinosaurios tuvieron cuatro alas en su transición para convertirse en aves».
La conclusión principal del equipo científico que ha llevado a cabo los análisis de la nueva especie es realmente contundente: ha quedado totalmente rebatido el argumento que defendían algunos expertos de que los dinosaurios con aspecto de ave vivieron demasiado tarde como para ser los antepasados de los pájaros.