En un comunicado, la Oficina del dirigente del movimiento, Abdel Malik Al Huthi, señaló: “Las primeras indicaciones recogidas en la investigación indican que este acto criminal es la obra de los servicios de inteligencia de EEUU e Israel”.
Él aseguró que este tipo de agresiones criminales lleva “la marca de la actuación de los norteamericanos e israelíes, que buscan sembrar la discordia entre grupos religiosos, sobre todo teniendo en cuenta que ellos serían los primeros beneficiarios”.
Él aseguró que este tipo de agresiones criminales lleva “la marca de la actuación de los norteamericanos e israelíes, que buscan sembrar la discordia entre grupos religiosos, sobre todo teniendo en cuenta que ellos serían los primeros beneficiarios”.