La oficina de la ONU para la coordinación de asuntos humanitarios (OCHA) estimó que unas 4.250 familias de Ramadi han abandonado sus hogares desde el 8 de abril, fecha en la cual el primer ministro, Haider al Abadi anunció el lanzamiento de una operación para retomar el control de la provincia de Anbar.
La lucha hasta ahora ha estado concentrada en Ramadi, capital de la provincia, que está a unos 100 kilómetros al oeste de Bagdad.
Sin embargo, las fuerzas del gobierno, que controlaban una pequeña parte de Ramadi y sus zonas aledañas, ahora han perdido terreno ante la potente contraofensiva del grupo yihadista.
Según la Organización Internacional de Migraciones, en Irak hay cerca de 2,7 millones de desplazados por el conflicto.