La película de Damien Chazelle era una de las 14 de la competición de este festival que cada año reúne en una pequeña ciudad balnearia del oeste de Francia lo mejor de la producción estadounidense.
La película cuenta la historia de un joven batería de jazz (Miles Teller) en un conservatorio de Manhattan que quiere convertirse en el mejor bajo la dirección de un profesor de métodos radicales (J.K. Simmons).
El jurado del festival, que este año cumple su 40ª edición, estaba presidio por el realizador Costa-Gavras.