Aunque seguramente los pokemones no se podrán cazar en los pasillos de este gran templo de las nuevas tecnologías, la realidad virtual y la realidad aumentada son "La tendencia del momento", asegura Ian Fogg, analista de IHS Insight.
El éxito mundial del juego para perseguir a las pequeñas criaturas virtuales anticipa "la fascinación" que generan las nuevas tecnologías que mezclan lo real con lo virtual, estima Hans-Joachim Kamp, presidente de la federación profesional Consumer & Home Electronics, una de las organizadoras del IFA.
"Tiene un potencial para cambiar totalmente nuestras costumbres. Más allá del ámbito de los juegos y del ocio, la lista de posibilidades se alarga cada día", preconiza Kamp.
Según Goldman Sachs, la realidad virtual, que nos transporta gracias a unas gafas especiales, y la realidad aumentada, que amplía lo que vemos con elementos virtuales, representarán antes del 2025 un mercado mundial de 80.000 millones de dólares, una cifra que equivale al mercado actual de los ordenadores.
"Hay muchas iniciativas industriales por el momento pero sigue siendo un mercado muy nuevo", afirma Ian Fogg, que se pregunta qué "conceptos de realidad virtual funcionarán y qué tipo de consumidores se verán implicados".
La realidad virtual y su necesidad de imágenes de gran definición podría de rebote impulsar el mercado de los teléfonos inteligentes, que está llegando a saturación.
Si los cascos de realidad virtual, los drones o las impresoras de 3D centrarán parte de las miradas en el IFA, los smartphones son, junto a los televisores de cada vez mayor definición, las tradicionales estrellas del salón.
Dirigido al público en general, más que su competidor en Las Vegas, el Consumer Electronic Show, que se organiza en enero, el IFA suele marcar las tendencias para las compras de las fiestas navideñas, tanto en el ámbito electrónico como en los aparatos electrodomésticos.
El año pasado, unas 240.000 personas visitaron la feria alemana.
Los grupos internacionales también aprovechan el IFA para dar a conocer sus últimas novedades a la prensa.
Si los rumores se confirman, Samsung presentará la tercera versión de su reloj S Gear, Sony sus dos nuevos smartphones de la gama Xperia y Huawei su segundo smartwach junto a una nueva gama de smartphones. También se espera que el coreano LG saque el modelo V20 con la última versión de Android.
Apple será como siempre el gran ausente, aunque el grupo californiano estará bien presente en la mente de todos, sobre todo porque podría presentar la séptima versión del iPhone en San Francisco el 7 de septiembre, el último día del IFA.
Los relojes conectados son otros de los productos estrella del salón de Berlín desde hace tres años y está previsto que tengan de nuevo este año un papel importante.
El éxito mundial del juego para perseguir a las pequeñas criaturas virtuales anticipa "la fascinación" que generan las nuevas tecnologías que mezclan lo real con lo virtual, estima Hans-Joachim Kamp, presidente de la federación profesional Consumer & Home Electronics, una de las organizadoras del IFA.
"Tiene un potencial para cambiar totalmente nuestras costumbres. Más allá del ámbito de los juegos y del ocio, la lista de posibilidades se alarga cada día", preconiza Kamp.
Según Goldman Sachs, la realidad virtual, que nos transporta gracias a unas gafas especiales, y la realidad aumentada, que amplía lo que vemos con elementos virtuales, representarán antes del 2025 un mercado mundial de 80.000 millones de dólares, una cifra que equivale al mercado actual de los ordenadores.
"Hay muchas iniciativas industriales por el momento pero sigue siendo un mercado muy nuevo", afirma Ian Fogg, que se pregunta qué "conceptos de realidad virtual funcionarán y qué tipo de consumidores se verán implicados".
- Smartphones, smartwatches y televisores -
La realidad virtual y su necesidad de imágenes de gran definición podría de rebote impulsar el mercado de los teléfonos inteligentes, que está llegando a saturación.
Si los cascos de realidad virtual, los drones o las impresoras de 3D centrarán parte de las miradas en el IFA, los smartphones son, junto a los televisores de cada vez mayor definición, las tradicionales estrellas del salón.
Dirigido al público en general, más que su competidor en Las Vegas, el Consumer Electronic Show, que se organiza en enero, el IFA suele marcar las tendencias para las compras de las fiestas navideñas, tanto en el ámbito electrónico como en los aparatos electrodomésticos.
El año pasado, unas 240.000 personas visitaron la feria alemana.
Los grupos internacionales también aprovechan el IFA para dar a conocer sus últimas novedades a la prensa.
Si los rumores se confirman, Samsung presentará la tercera versión de su reloj S Gear, Sony sus dos nuevos smartphones de la gama Xperia y Huawei su segundo smartwach junto a una nueva gama de smartphones. También se espera que el coreano LG saque el modelo V20 con la última versión de Android.
Apple será como siempre el gran ausente, aunque el grupo californiano estará bien presente en la mente de todos, sobre todo porque podría presentar la séptima versión del iPhone en San Francisco el 7 de septiembre, el último día del IFA.
Los relojes conectados son otros de los productos estrella del salón de Berlín desde hace tres años y está previsto que tengan de nuevo este año un papel importante.