"Les pido a los senadores que demuestren que existe un peronismo responsable y confiable que no se deja conducir por las locuras que impulsa Cristina Fernández de Kirchner", dijo Macri en un mensaje grabado y emitido a dos días de que el Senado debata la iniciativa en el Parlamento.
Como en otras ocasiones cuando afrontó dificultades políticas, Macri hizo blanco en la ex presidenta argentina (2007-2015) y actual senadora nacional para insistir en su pedido a los legisladores peronistas que no transformen en ley un proyecto que ya tuvo su aprobación en la Cámara de Diputados.
La legislación procura, entre otros objetivos, que las tarifas de los servicios públicos regresen al valor que tenían en diciembre pasado y que desde esa fecha los aumentos no superen el alza de los salarios.
La iniciativa fue aprobada el 9 de mayo pasado por la Cámara de Diputados gracias al aval del kirchnerismo pero también de otras bancadas peronistas como el Frente Renovador y el Bloque Peronista, que en el Congreso también acompañaron proyectos impulsados por la coalición gobernante de centroderecha Cambiemos.
"Tratar de loca a una mujer. Típico de un machirulo", le respondió Kirchner a Macri en su cuenta de Twitter, utilizando un término que el movimiento feminista suele usar para, de forma despectiva, referirse a un varón machista.
Macri anunció que vetará la norma si resulta aprobada, una decisión que causaría un malhumor en una población que ya se manifestó masivamente en contra de los incrementos.
Para no llegar a esa instancia, Macri dialoga con tres gobernadores peronistas "cercanos" a su idea política, Juan Schiaretti (Córdoba), Gustavo Bordet (Entre Ríos) y Sergio Uñac (San Juan) para que los senadores provinciales no voten el proyecto, publicó hoy el diario "La Nación".
El jefe de la bancada del Partido Justicialista en el Senado, Miguel Ángel Pichetto, anunció días atrás que cuenta con los votos necesarios para sancionar la ley, y que lo hará pese a que el oficialismo intentó "dividir el frente opositor" en el Parlamento.
"El Congreso a veces saca (aprueba) leyes con mensajes de naturaleza política para que el Poder Ejecutivo revea el camino" trazado, dijo Pichetto a radio Con Vos.
Al llegar al poder, en diciembre de 2015, Macri dispuso actualizar las tarifas de los servicios públicos a la vez que disminuyó los subsidios estatales que rigieron durante el kirchnerismo.
Hasta la actualidad el alza de las tarifas rondó entre 500 y 1.600 por ciento, según el Observatorio de Tarifas de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET).
La aprobación de la ley y su eventual implementación le generaría al Estado argentino "un costo de 120.000 millones de pesos (4.800 millones de dólares)", el equivalente a un punto porcentual del Producto Bruto Interno (PBI), dijo el pasado 9 de mayo el ministro de Energía, Juan José Aranguren.
Argentina negocia con el Fondo Monetario Internacional (FMI) un crédito que le permita contener el efecto de la crisis financiera sufrida en las últimas semanas. Una de las condiciones para lograrlo es, justamente, la reducción de su déficit fiscal.
"Las leyes mágicas suenan bien, pero qué pasa con el agujero fiscal que dejarían. ¿De dónde sale el dinero para poder taparlo? Porque no tenemos ese dinero", afirmó Macri.
Como en otras ocasiones cuando afrontó dificultades políticas, Macri hizo blanco en la ex presidenta argentina (2007-2015) y actual senadora nacional para insistir en su pedido a los legisladores peronistas que no transformen en ley un proyecto que ya tuvo su aprobación en la Cámara de Diputados.
La legislación procura, entre otros objetivos, que las tarifas de los servicios públicos regresen al valor que tenían en diciembre pasado y que desde esa fecha los aumentos no superen el alza de los salarios.
La iniciativa fue aprobada el 9 de mayo pasado por la Cámara de Diputados gracias al aval del kirchnerismo pero también de otras bancadas peronistas como el Frente Renovador y el Bloque Peronista, que en el Congreso también acompañaron proyectos impulsados por la coalición gobernante de centroderecha Cambiemos.
"Tratar de loca a una mujer. Típico de un machirulo", le respondió Kirchner a Macri en su cuenta de Twitter, utilizando un término que el movimiento feminista suele usar para, de forma despectiva, referirse a un varón machista.
Macri anunció que vetará la norma si resulta aprobada, una decisión que causaría un malhumor en una población que ya se manifestó masivamente en contra de los incrementos.
Para no llegar a esa instancia, Macri dialoga con tres gobernadores peronistas "cercanos" a su idea política, Juan Schiaretti (Córdoba), Gustavo Bordet (Entre Ríos) y Sergio Uñac (San Juan) para que los senadores provinciales no voten el proyecto, publicó hoy el diario "La Nación".
El jefe de la bancada del Partido Justicialista en el Senado, Miguel Ángel Pichetto, anunció días atrás que cuenta con los votos necesarios para sancionar la ley, y que lo hará pese a que el oficialismo intentó "dividir el frente opositor" en el Parlamento.
"El Congreso a veces saca (aprueba) leyes con mensajes de naturaleza política para que el Poder Ejecutivo revea el camino" trazado, dijo Pichetto a radio Con Vos.
Al llegar al poder, en diciembre de 2015, Macri dispuso actualizar las tarifas de los servicios públicos a la vez que disminuyó los subsidios estatales que rigieron durante el kirchnerismo.
Hasta la actualidad el alza de las tarifas rondó entre 500 y 1.600 por ciento, según el Observatorio de Tarifas de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET).
La aprobación de la ley y su eventual implementación le generaría al Estado argentino "un costo de 120.000 millones de pesos (4.800 millones de dólares)", el equivalente a un punto porcentual del Producto Bruto Interno (PBI), dijo el pasado 9 de mayo el ministro de Energía, Juan José Aranguren.
Argentina negocia con el Fondo Monetario Internacional (FMI) un crédito que le permita contener el efecto de la crisis financiera sufrida en las últimas semanas. Una de las condiciones para lograrlo es, justamente, la reducción de su déficit fiscal.
"Las leyes mágicas suenan bien, pero qué pasa con el agujero fiscal que dejarían. ¿De dónde sale el dinero para poder taparlo? Porque no tenemos ese dinero", afirmó Macri.