"¿Qué puede hacer la Constituyente? Todo lo que quiera. Es el gran poder (...). Puede emitir una ley constitucional, por encima de la ley, estableciendo leyes de justicia firmes y de obligatorio cumplimiento por todas las instituciones, la Fiscalía, los tribunales, etcétera, etcétera", dijo el mandatario durante su programa semanal en la televisora estatal VTV.
La iniciativa de Maduro es rechazada por la oposición, recrudeciendo las protestas contra el gobernante socialista, con disturbios que dejan 59 muertos en 58 días, según el balance de la Fiscalía. Gobierno y oposición se culpan mutuamente por los hechos de violencia.
"Es una Constituyente para tener el poder supremo de luchar contra la corrupción en todas las partes donde esté enquistada (...). Es una Constituyente para cambiarlo todo", afirmó Maduro.
La inscripción de candidatos para la Constituyente se realizará el jueves y el viernes próximos, anunció esta semana el Consejo Nacional Electoral (CNE). Los postulantes deberán inscribirse en un portal web y recaudar firmas que respalden su aspiración.
Las elecciones de constituyentes, según proyecta el CNE, se harán a finales de julio con un sistema que combina votaciones por municipios y por sectores sociales.
El mecanismo sectorial es considerado por analistas y dirigentes opositores como una "trampa" con la que Maduro busca eludir el voto universal y mantener el poder en momentos en los que su gestión es rechazada por siete de cada diez venezolanos, de acuerdo a encuestas privadas.
Pero el presidente, nuevamente, defendió la Constituyente. "Vamos todos a votar. Votos sí, balas no (...). Constituyente o violencia, Constituyente o golpe de Estado, Constituyente o guarimbas (protestas violentas)", expresó.
La oposición denuncia que el sistema planteado viola, además, la proporcionalidad del voto, principio establecido en la Constitución venezolana, que contempla que los territorios con mayor población deben tener mayor representación.
Según dijo Maduro, el Distrito Capital de Caracas, con una población estimada de más de dos millones de habitantes, elegirá a siete delegados; mientras que el estado sureño de Amazonas, con 150.000 residentes, escogerá a ocho.
La iniciativa de Maduro es rechazada por la oposición, recrudeciendo las protestas contra el gobernante socialista, con disturbios que dejan 59 muertos en 58 días, según el balance de la Fiscalía. Gobierno y oposición se culpan mutuamente por los hechos de violencia.
"Es una Constituyente para tener el poder supremo de luchar contra la corrupción en todas las partes donde esté enquistada (...). Es una Constituyente para cambiarlo todo", afirmó Maduro.
La inscripción de candidatos para la Constituyente se realizará el jueves y el viernes próximos, anunció esta semana el Consejo Nacional Electoral (CNE). Los postulantes deberán inscribirse en un portal web y recaudar firmas que respalden su aspiración.
Las elecciones de constituyentes, según proyecta el CNE, se harán a finales de julio con un sistema que combina votaciones por municipios y por sectores sociales.
El mecanismo sectorial es considerado por analistas y dirigentes opositores como una "trampa" con la que Maduro busca eludir el voto universal y mantener el poder en momentos en los que su gestión es rechazada por siete de cada diez venezolanos, de acuerdo a encuestas privadas.
Pero el presidente, nuevamente, defendió la Constituyente. "Vamos todos a votar. Votos sí, balas no (...). Constituyente o violencia, Constituyente o golpe de Estado, Constituyente o guarimbas (protestas violentas)", expresó.
La oposición denuncia que el sistema planteado viola, además, la proporcionalidad del voto, principio establecido en la Constitución venezolana, que contempla que los territorios con mayor población deben tener mayor representación.
Según dijo Maduro, el Distrito Capital de Caracas, con una población estimada de más de dos millones de habitantes, elegirá a siete delegados; mientras que el estado sureño de Amazonas, con 150.000 residentes, escogerá a ocho.