"Estos efectivos policiales cayeron abatidos por balas asesinas de quienes presumimos son componentes del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo", dijo de Vargas en una conferencia de prensa.
Los hechos tuvieron lugar en inmediaciones del asentamiento campesino Yaguareté Forest, distante a unos 300 km al noreste, en el departamento de San Pedro.
El pasado domingo, a 20 km del lugar, habían sido abatidos otros dos policías, en momentos en que el papa Francisco visitaba Paraguay.
"Ellos fueron emboscados y acribillados en la patrullera en la que se desplazaban. El vehículo tiene entre 120 y 150 impactos de bala de armas calibre 5,56 y 7,62 mm. Los cuerpos fueron transportados a la morgue", relató De Vargas.
El Ejecutivo dispuso el acuartelamiento de los efectivos de la policía y el alerta permanente ante otros eventuales ataques.
A la zona fueron enviados soldados de la Fuerza de Tarea Conjunta del Ejército y la Policía, informó el portavoz del Gobierno.
Los ataques, habitualmente esporádicos del EPP, ya dejaron un saldo de más de 40 muertos desde que comenzaron a operar hace siete años.
En tanto, De Vargas dijo que "se ha sacado de circulación a 34 terroristas".