El jefe de la misión de la ONU en Libia (UNSMIL), Bernardino León, indicó haber propuesto a las partes detener las operaciones militares durante algunos días para "crear un ambiente propicio al diálogo".
Por su parte, la representante diplomática de la Unión Europea, Federica Mogherini, afirmó que esta reunión es una "oportunidad crucial" para Libia.
"Esta reunión [...] supone una oportunidad crucial para reunir a los principales actores y encontrar una solución pacífica basada en el diálogo", indicó Mogherini en un comunicado.
Libia está sumida en el caos tras la caída del dirigente Muamar Gadafi en octubre de 2011, con la emergencia de milicias de exrebeldes que hoy imponen su ley. La situación se ha agravado en los últimos meses con dos gobiernos paralelos que se disputan el poder, lo que hace temer que se produzca una guerra abierta.
"La reunión se celebrará la próxima semana (...) en la sede de la oficina de Naciones Unidas en Ginebra" indica UNSMIL en un comunicado.
El acuerdo fue logrado por Bernardino León, jefe de la UNSMIL, tras largas consultas con las partes en las últimas semanas.
Según la representante diplomática de la UE, "no se debe perder la ocasión de establecer un alto el fuego y de hallar una solución política".
La reunión de Ginebra "representa la última oportunidad que debe ser aprovechada. Libia está en una situación crucial y los diferentes actores no deben tener la menor duda sobre la gravedad de la situación del país" agregó Mogherini.