Kabila nombró candidato al secretario general del partido gubernamental, Emmanuel Ramazani Shadary, informó el portavoz del Ejecutivo, Lambert Mende.
Así se pone fin a años de especulación sobre si Kabila, de 47 años, seguiría en el poder. La Constitución limita a dos los mandatos presidenciales. El segundo mandato de Kabila concluyó a finales de 2016 pero se negó a abandonar el poder y desde entonces las elecciones fueron pospuestas en varias ocasiones. La comunidad internacional le había instado a acatar la Constitución y retirarse.
Las elecciones presidenciales se celebrarán el 23 de diciembre. A ellas tiene pensado concurrir el ex vicepresidente y líder miliciano Jean-Pierre Bemba. Este salió en libertad el pasado junio después de que la Corte Penal Internacional (CPI) de La Haya anulara su condena a 18 años de cárcel por asesinatos, violaciones y saqueos.
Shadary, por su parte, fue vicejefe de Gobierno y ministro de Interior. En 2017, la Unión Europea impuso sanciones en su contra por supuestas violaciones de los derechos humanos.
Kabila no consiguió llevar estabilidad a la República Democrática del Congo, donde unos 4,5 millones de personas huyeron debido a conflictos en el centro y el este del país, rico en materias primas.
Así se pone fin a años de especulación sobre si Kabila, de 47 años, seguiría en el poder. La Constitución limita a dos los mandatos presidenciales. El segundo mandato de Kabila concluyó a finales de 2016 pero se negó a abandonar el poder y desde entonces las elecciones fueron pospuestas en varias ocasiones. La comunidad internacional le había instado a acatar la Constitución y retirarse.
Las elecciones presidenciales se celebrarán el 23 de diciembre. A ellas tiene pensado concurrir el ex vicepresidente y líder miliciano Jean-Pierre Bemba. Este salió en libertad el pasado junio después de que la Corte Penal Internacional (CPI) de La Haya anulara su condena a 18 años de cárcel por asesinatos, violaciones y saqueos.
Shadary, por su parte, fue vicejefe de Gobierno y ministro de Interior. En 2017, la Unión Europea impuso sanciones en su contra por supuestas violaciones de los derechos humanos.
Kabila no consiguió llevar estabilidad a la República Democrática del Congo, donde unos 4,5 millones de personas huyeron debido a conflictos en el centro y el este del país, rico en materias primas.