"El presidente Salva Kiir (...) no está dispuesto a volver a trabajar con Riek Machar de ninguna manera", señaló Makuei en un video en el que acusa a Machar de ser el responsable de una guerra civil que ya dura cuatro años y medio, que ha dejado decenas de miles de muertos y cuatro millones de desplazados.
Kiir quiere llevar paz al país del este de África pero no cree que esto sea posible mediante la formación de un Gobierno de unidad transitorio con Machar, añadió Makuei.
"Riek Machar tendrá que esperar a las elecciones" si quiere ocupar algún puesto oficial en el país, aseguró.
Kiir y Machar se reunieron el miércoles por primera vez en dos años en Adís Abeba, capital de la vecina Etiopía, en un intento por acabar con el conflicto. Fue el primer encuentro desde que Machar abandonó el país en 2016 y se exilió en Sudáfrica.
Pese a la negativa de Kiir a cooperar, el ministro de Relaciones Exteriores sursudanés, Martin Elia Lomuro, dijo que la Autoridad Intergubernamental de Desarrollo, un organismo regional que ayudó a facilitar las conversaciones, planea otros tres encuentros en Sudán, Kenia y Etiopía en un intento por "reconciliar la posición de las partes". No se informó sobre las fechas de estos encuentros.
Mientras no haya acuerdo, Machar seguirá moviéndose entre Sudán, Kenia y Etiopía, dijo Lomuro, pero "después de eso (...) debería instalarse fuera de la región y por tanto en ningún país cerca de Sudán del Sur".
Sudán del Sur, la nación más joven del mundo, surgió de la escisión de Sudán en 2011, pero en 2013 quedó envuelta en una guerra civil después de que Kiir acusara a Machar, que era su vicepresidente, de estar planeando un golpe de Estado. Hasta ahora han fracasado varios ceses del fuego e intentos por lograr un acuerdo de paz.
Kiir quiere llevar paz al país del este de África pero no cree que esto sea posible mediante la formación de un Gobierno de unidad transitorio con Machar, añadió Makuei.
"Riek Machar tendrá que esperar a las elecciones" si quiere ocupar algún puesto oficial en el país, aseguró.
Kiir y Machar se reunieron el miércoles por primera vez en dos años en Adís Abeba, capital de la vecina Etiopía, en un intento por acabar con el conflicto. Fue el primer encuentro desde que Machar abandonó el país en 2016 y se exilió en Sudáfrica.
Pese a la negativa de Kiir a cooperar, el ministro de Relaciones Exteriores sursudanés, Martin Elia Lomuro, dijo que la Autoridad Intergubernamental de Desarrollo, un organismo regional que ayudó a facilitar las conversaciones, planea otros tres encuentros en Sudán, Kenia y Etiopía en un intento por "reconciliar la posición de las partes". No se informó sobre las fechas de estos encuentros.
Mientras no haya acuerdo, Machar seguirá moviéndose entre Sudán, Kenia y Etiopía, dijo Lomuro, pero "después de eso (...) debería instalarse fuera de la región y por tanto en ningún país cerca de Sudán del Sur".
Sudán del Sur, la nación más joven del mundo, surgió de la escisión de Sudán en 2011, pero en 2013 quedó envuelta en una guerra civil después de que Kiir acusara a Machar, que era su vicepresidente, de estar planeando un golpe de Estado. Hasta ahora han fracasado varios ceses del fuego e intentos por lograr un acuerdo de paz.