Marte
Tras cinco meses de trabajo, el Equipo de Definición Científica de la agencia espacial de estadounidense (SDT) dio a conocer un documento de 154 páginas que contiene sus propuestas para el próximo vehículo marciano.
La misión podría utilizar por primera vez el análisis microscópico, recoger las primeras muestras de rocas para su posible regreso a la Tierra y hacer pruebas para utilizar los recursos naturales del sitio para utilizarlos en un futuro viaje humano.
La Misión Marte 2020 se basará en el trabajo realizado por el vehículo "Curiosity" de la NASA, que ha estado explorando el planeta rojo desde agosto de 2012 y ya ha encontrado señales de ambientes potencialmente habitables.
La misión representará "un gran paso hacia la búsqueda de señales de vida", dijo Jim Green, director de la División de Ciencias Planetarias en la sede de la NASA.
El siguiente paso de la NASA consistirá en analizar las recomendaciones y hacer un llamado para obtener los instrumentos científicos, que podrían incluir dispositivos de mayor resolución de imagen, microscopios, mineralogía escala fina, química orgánica y herramientas de detección de carbono para buscar elementos biológicos en la superficie de Marte.
"La combinación de este conjunto de instrumentos sería increíblemente poderoso", dijo Jack Mustard, Presidente SDT y profesor de ciencias geológicas en la Universidad Brown.
El vehículo recaudaría alrededor de 31 muestras que algún día podrían ser devueltas a la Tierra, lo que representa "un legado para la comprensión del desarrollo de la habitabilidad del planeta", dijo a los periodistas.
Su diseño estará basado en el del "Curiosity", un proyecto valorado en 2.500 millones de dólares lanzado en marzo del 2001, y utilizará la misma tecnología de lanzamiento y aterrizaje. También se reutilizarán algunos planos y partes de su antecesor para limitar los gastos de la misión.
La agencia espacial de EEUU aún no ha desarrollado la tecnología para devolver las muestras a la Tierra sin alterar su contenido y por ahora no hay planes para un potencial regreso del material.
John Grunsfeld, administrador asociado de la NASA para la ciencia, afirmó que para el 2020 el vehículo marciano permitirá que la NASA dé un paso para "responder a las grandes preguntas" previas a una visita humana, prevista hacia el 2030.
La misión podría utilizar por primera vez el análisis microscópico, recoger las primeras muestras de rocas para su posible regreso a la Tierra y hacer pruebas para utilizar los recursos naturales del sitio para utilizarlos en un futuro viaje humano.
La Misión Marte 2020 se basará en el trabajo realizado por el vehículo "Curiosity" de la NASA, que ha estado explorando el planeta rojo desde agosto de 2012 y ya ha encontrado señales de ambientes potencialmente habitables.
La misión representará "un gran paso hacia la búsqueda de señales de vida", dijo Jim Green, director de la División de Ciencias Planetarias en la sede de la NASA.
El siguiente paso de la NASA consistirá en analizar las recomendaciones y hacer un llamado para obtener los instrumentos científicos, que podrían incluir dispositivos de mayor resolución de imagen, microscopios, mineralogía escala fina, química orgánica y herramientas de detección de carbono para buscar elementos biológicos en la superficie de Marte.
"La combinación de este conjunto de instrumentos sería increíblemente poderoso", dijo Jack Mustard, Presidente SDT y profesor de ciencias geológicas en la Universidad Brown.
El vehículo recaudaría alrededor de 31 muestras que algún día podrían ser devueltas a la Tierra, lo que representa "un legado para la comprensión del desarrollo de la habitabilidad del planeta", dijo a los periodistas.
Su diseño estará basado en el del "Curiosity", un proyecto valorado en 2.500 millones de dólares lanzado en marzo del 2001, y utilizará la misma tecnología de lanzamiento y aterrizaje. También se reutilizarán algunos planos y partes de su antecesor para limitar los gastos de la misión.
La agencia espacial de EEUU aún no ha desarrollado la tecnología para devolver las muestras a la Tierra sin alterar su contenido y por ahora no hay planes para un potencial regreso del material.
John Grunsfeld, administrador asociado de la NASA para la ciencia, afirmó que para el 2020 el vehículo marciano permitirá que la NASA dé un paso para "responder a las grandes preguntas" previas a una visita humana, prevista hacia el 2030.