Los insurgentes se hicieron con todas las armas del puesto, después de que este cayese tras un intenso tiroteo, añadió. Las fuerzas afganas también infligieron grandes pérdidas entre los talibanes, aunque no se informó sobre un número exacto.
Otros cinco policías murieron y dos resultaron heridos en ataques talibanes contra dos puestos en Zabul, en el sur, a última hora del viernes, dijo a dpa Haji Atta Jan Haqbayan, miembro del consejo provincial. Los talibanes reivindicaron ambos ataques y aseguraron haber arrestado a un oficial y matado a otros diez.
Los ataques contra puestos y bases policiales y militares se han convertido en semanales, e incluso diarios, en los últimos meses en Afganistán.
La guerra se intensifica en el país y las fuerzas de seguridad están cada vez más sobrepasadas y desmoralizadas. La OTAN decidió aumentar el número de efectivos internacionales en el país este año, muchos de los cuales ayudarán a formar al Ejército y la Polícia afganos.