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El crucero lanzamisiles Mariscal Ustinov
Rusia es el principal valedor del Gobierno sirio en el conflicto armado con diversos grupos rebeldes y ha advertido a Estados Unidos de que no debe lanzar ningún nuevo ataque contra las Fuerzas Armadas del país árabe.
La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Maria Zajarova, dijo que "a juzgar por el incremento de las tropas estadounidenses en Cercano Oriente, no se pueden descartar nuevos ataques con misiles contra objetivos en Siria".
En abril, Estados Unidos, Francia y el Reino Unido habían lanzado misiles de crucero contra instalaciones militares en Siria como represalia por un supuesto ataque con armas químicas del Ejército sirio contra la ciudad de Duma.
El portavoz de Kremlin, Dmitri Peskov, relacionó las maniobras navales rusas con la situación en la provincia de Idlib, en el norte de Siria, donde el Ejército del presidente Bashar al Assad parece estar preparando una gran ofensiva para expulsar a los rebeldes de su último feudo importante. Tras calificar de complicada la situación en Idlib, Peskov señaló, según la agencia de noticias Interfax, que "cualquier aumento de las medidas de precaución está justificada".
Rusia ha advertido en los últimos días que los rebeldes sirios preparan un montaje, usando armas químicas y simulando que ha sido el gobierno sirio, para crear la justificación para un bombardeo estadounidense.
La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Maria Zajarova, dijo que "a juzgar por el incremento de las tropas estadounidenses en Cercano Oriente, no se pueden descartar nuevos ataques con misiles contra objetivos en Siria".
En abril, Estados Unidos, Francia y el Reino Unido habían lanzado misiles de crucero contra instalaciones militares en Siria como represalia por un supuesto ataque con armas químicas del Ejército sirio contra la ciudad de Duma.
El portavoz de Kremlin, Dmitri Peskov, relacionó las maniobras navales rusas con la situación en la provincia de Idlib, en el norte de Siria, donde el Ejército del presidente Bashar al Assad parece estar preparando una gran ofensiva para expulsar a los rebeldes de su último feudo importante. Tras calificar de complicada la situación en Idlib, Peskov señaló, según la agencia de noticias Interfax, que "cualquier aumento de las medidas de precaución está justificada".
Rusia ha advertido en los últimos días que los rebeldes sirios preparan un montaje, usando armas químicas y simulando que ha sido el gobierno sirio, para crear la justificación para un bombardeo estadounidense.
