Por Juan Luis Salinas, desde Sao Paulo. Fotografías: Agencia Fotosite.
Sastrería
La Deconstrucción del traje–chaqueta y la reinterpretación de prendas del guardarropas masculino es la tendencia más fuerte de la temporada en la pasarela brasileña. Prácticamente en todas las colecciones aparecieron creaciones armadas en base a los códigos de la sastrería y con una estética al borde de la androgenia. En escena abundaron chaquetas de hombreras cuadradas como las Cori, amplios pantalones de tiro largo con pinzas como los de Maria Bonita y los abrigos XL de paño como el que lució la top Agyness Deyn para Ellus. LOS MEJORES LOOKS: Las chaquetas tipo levita sin mangas con aplicaciones metálicas de Forum y los trajes dos piezas estilo Grace Jones de Iódice.
Todo Es Tartán
El Milenario estampado a cuadros de la tradición escocesa, y que luego fue recuperado por los punks londinenses de fines de los 70, es el print más utilizado por las etiquetas brasileñas más juveniles. El pantone con que lo reinventan es variado. Aunque la mayoría utiliza el tradicional entrecruce de líneas en negro y rojo; la marca Do Estilista lo recrea en diversas tonalidades de azul y la etiqueta Colcci se queda con el clásico juego cromático negro–gris–blanco. LOS MEJORES LOOKS: La colección de Triton que lo utilizó en chaquetas entalladas y una falda larga combinada con una camiseta que homenajeaba a Vivienne Westwood, la reina del punk.
Futurismo
Siluetas Robóticas, vestidos cortos de mangas rígidas, altos cuellos de formas caprichosas y texturas hi–tech que parecen metalizadas son las claves con que la pasarela paulista sigue la corriente de líneas experimentales que impusieron etiquetas internacionales como Rodarte, Balenciaga y Gareth Pough. La propuesta fue interpretada en clave oscura por Lino Villaventura y Waldemar Iodice, quien realizó su desfile inspirado en la cinta 'Blade Runner'. Más animosa, la diseñadora Pricilla Darlot mostró diseños cortos, pero de proporciones fuertes en telas metalizadas. LOS MEJORES LOOKS: Las entalladas chaquetas tipo parkas con cierres metálicos de Animale y los severos vestidos de satén plateado tipo 'Guerra de las Galaxias' de Reinaldo Laurenço.
A Punto
Lo Tejido se impone con puntos gruesos y diseños volumétricos. Maxi suéteres llevados como vestidos, chalecos que parecen abrigos, bufandas envolventes y hasta gruesas calcetas para combinar con botines de tacón son algunas de las piezas en las que los diseñadores brasileños utilizaron la calidez de la lana. Aunque la opción generalizada fueron creaciones que parecían manufacturadas artesanalmente, sorprenden por la suavidad de sus texturas y la deconstrucción de sus siluetas. LOS MEJORES LOOKS: Los chalecos–vestidos en tonos grises de Osklen, un suéter oscuro de formas vanguardistas de la marca Animale y los largos suéteres sin mangas de Ellus 2nd Floor.
Cóctel '80
Como Sacados de la escena new wave de mediados de los 80, y con la imponente sensualidad de las colecciones que en la época impusieron Azzedine Alaïa o Thierry Mugler, por la pasarela paulista desfilaron vestidos strapless o de escote asimétrico. Mayoritariamente en tonalidades oscuras (el gran común denominador de todas las propuestas), con la cintura muy marcada y con un largo siempre sobre la rodilla, estos minivestidos de noche se llevan con tacones muy altos o botas largas. LOS MEJORES LOOKS: El modelo de negro afirmado en un hombro de Iódice y el vestido strapless tubular con franjas de colores firmados por Cori.
Juan Luis Salinas.
Sastrería
La Deconstrucción del traje–chaqueta y la reinterpretación de prendas del guardarropas masculino es la tendencia más fuerte de la temporada en la pasarela brasileña. Prácticamente en todas las colecciones aparecieron creaciones armadas en base a los códigos de la sastrería y con una estética al borde de la androgenia. En escena abundaron chaquetas de hombreras cuadradas como las Cori, amplios pantalones de tiro largo con pinzas como los de Maria Bonita y los abrigos XL de paño como el que lució la top Agyness Deyn para Ellus. LOS MEJORES LOOKS: Las chaquetas tipo levita sin mangas con aplicaciones metálicas de Forum y los trajes dos piezas estilo Grace Jones de Iódice.
Todo Es Tartán
El Milenario estampado a cuadros de la tradición escocesa, y que luego fue recuperado por los punks londinenses de fines de los 70, es el print más utilizado por las etiquetas brasileñas más juveniles. El pantone con que lo reinventan es variado. Aunque la mayoría utiliza el tradicional entrecruce de líneas en negro y rojo; la marca Do Estilista lo recrea en diversas tonalidades de azul y la etiqueta Colcci se queda con el clásico juego cromático negro–gris–blanco. LOS MEJORES LOOKS: La colección de Triton que lo utilizó en chaquetas entalladas y una falda larga combinada con una camiseta que homenajeaba a Vivienne Westwood, la reina del punk.
Futurismo
Siluetas Robóticas, vestidos cortos de mangas rígidas, altos cuellos de formas caprichosas y texturas hi–tech que parecen metalizadas son las claves con que la pasarela paulista sigue la corriente de líneas experimentales que impusieron etiquetas internacionales como Rodarte, Balenciaga y Gareth Pough. La propuesta fue interpretada en clave oscura por Lino Villaventura y Waldemar Iodice, quien realizó su desfile inspirado en la cinta 'Blade Runner'. Más animosa, la diseñadora Pricilla Darlot mostró diseños cortos, pero de proporciones fuertes en telas metalizadas. LOS MEJORES LOOKS: Las entalladas chaquetas tipo parkas con cierres metálicos de Animale y los severos vestidos de satén plateado tipo 'Guerra de las Galaxias' de Reinaldo Laurenço.
A Punto
Lo Tejido se impone con puntos gruesos y diseños volumétricos. Maxi suéteres llevados como vestidos, chalecos que parecen abrigos, bufandas envolventes y hasta gruesas calcetas para combinar con botines de tacón son algunas de las piezas en las que los diseñadores brasileños utilizaron la calidez de la lana. Aunque la opción generalizada fueron creaciones que parecían manufacturadas artesanalmente, sorprenden por la suavidad de sus texturas y la deconstrucción de sus siluetas. LOS MEJORES LOOKS: Los chalecos–vestidos en tonos grises de Osklen, un suéter oscuro de formas vanguardistas de la marca Animale y los largos suéteres sin mangas de Ellus 2nd Floor.
Cóctel '80
Como Sacados de la escena new wave de mediados de los 80, y con la imponente sensualidad de las colecciones que en la época impusieron Azzedine Alaïa o Thierry Mugler, por la pasarela paulista desfilaron vestidos strapless o de escote asimétrico. Mayoritariamente en tonalidades oscuras (el gran común denominador de todas las propuestas), con la cintura muy marcada y con un largo siempre sobre la rodilla, estos minivestidos de noche se llevan con tacones muy altos o botas largas. LOS MEJORES LOOKS: El modelo de negro afirmado en un hombro de Iódice y el vestido strapless tubular con franjas de colores firmados por Cori.
Juan Luis Salinas.