Paul Laverty y Icíar Bollaín
"Espero que esta película celebre la resistencia", ya que resistir "es una eleccion política pero a la vez es muy dramático porque en Cochabamba se perdieron vidas, hubo heridos", dice del filme su guionista, el escocés Paul Laverty, en entrevista a la AFP.
Además, la llamada "guerra del agua", una revuelta en el año 2000 en la ciudad boliviana de Cochabamba contra la privatización del suministro a manos de una empresa estadounidense, "es una de las pocas de este siglo ganadas", apunta a la AFP la española Icíar Bollaín durante la presentación del filme, elegido por la academia española de cine para representar a España en los Oscar.
El agua "es el oro del siglo XXI, está siendo ya motivo de guerras, muere más gente por el agua sucia que por las guerras, y cada vez hay menos, está más contaminada y cada vez somos más", ahonda.
"También la lluvia", que abrió este sábado la 55ª edición del Festival Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) y también es la elegida por España a los premios Ariel mexicanos, narra con "tres historias", según su guionista, el rodaje de un filme sobre el descubrimiento de América durante la guerra del agua en 2000 en Bolivia.
El mexicano Gael García Bernal, el español Luis Tosar y el boliviano Juan Carlos Aduviri protagonizan la película, que contó con numerosos actores y extras bolivianos y la participación del ejército y la policía.
Va de "unos cineastas intentando hacer una película concienciada sobre la conquista con un director que tiene toda la sensibilidad de lo que pasó hace 500 años y muy poca sobre lo que está delante de él, y un productor que va a Bolivia porque es barato y porque va a pagar poco a los extras", pero también es "un canto a la amistad" y "un homenaje al cine", resume Bollaín.
Durante el rodaje en Bolivia, donde pidieron a las autoridades cerrar el centro de Cochabamba para rodar las revueltas de 2000, al igual que se ve en el filme, "notas que estás trabajando con gente que está sobreviviendo", comenta.
Los extras bolivianos, si tenían día de mercado no acudían al rodaje y en la selva los campesinos no aceptaron trabajar en el filme: "Tu película les va a arreglar un día y su puesto de mercado es su medio de subsistencia".
La cinta "denuncia" y transmite "unos valores muy claros", pero "intenta matizar, hablar de muchas cosas a diferentes niveles", según Bollaín, actriz y directora de "Te doy mis ojos" u "Hola, ¿estás sola?"
"Lo que me fascinaba era la posibilidad de hacer algo contemporáneo y relevante, y de alguna manera paralelo a lo que pasó hace 500 años", explica Laverty, guionista de referencia de las películas "sociales" del director británico Ken Loach.
"La historia no es neutral: depende de quién la escribe y del punto de vista que toma": "Desde siempre Cristóbal Colón ha sido una figura muy controvertida", se le tiene como "un héroe, pero a expensas de olvidar que instituyó la esclavitud, mutiló a la gente que no encontraba suficiente oro", argumenta.
Por eso "es muy interesante ver qué narración de nuestra propia historia hemos aceptado", reflexiona el escritor de "La canción de Carla", "Mi nombre es Joe" o "Sweet Sixteen", que también habla de la "resistencia" ante la crisis económica actual.
"Cuando ves los recortes en toda Europa, volvemos a ver a los pobres pagar el precio de las decisiones de los banqueros y las élites financieras, y lo único que puede hacerse es resistir: me gustaría que toda Europa hiciera lo que está haciendo Francia, cerrando refinerías; si tuviéramos la resistencia y la valentía de la gente de Cochabamba, no tendríamos estos recortes" y "cambiaría todo el escenario político", formula.
Además, la llamada "guerra del agua", una revuelta en el año 2000 en la ciudad boliviana de Cochabamba contra la privatización del suministro a manos de una empresa estadounidense, "es una de las pocas de este siglo ganadas", apunta a la AFP la española Icíar Bollaín durante la presentación del filme, elegido por la academia española de cine para representar a España en los Oscar.
El agua "es el oro del siglo XXI, está siendo ya motivo de guerras, muere más gente por el agua sucia que por las guerras, y cada vez hay menos, está más contaminada y cada vez somos más", ahonda.
"También la lluvia", que abrió este sábado la 55ª edición del Festival Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) y también es la elegida por España a los premios Ariel mexicanos, narra con "tres historias", según su guionista, el rodaje de un filme sobre el descubrimiento de América durante la guerra del agua en 2000 en Bolivia.
El mexicano Gael García Bernal, el español Luis Tosar y el boliviano Juan Carlos Aduviri protagonizan la película, que contó con numerosos actores y extras bolivianos y la participación del ejército y la policía.
Va de "unos cineastas intentando hacer una película concienciada sobre la conquista con un director que tiene toda la sensibilidad de lo que pasó hace 500 años y muy poca sobre lo que está delante de él, y un productor que va a Bolivia porque es barato y porque va a pagar poco a los extras", pero también es "un canto a la amistad" y "un homenaje al cine", resume Bollaín.
Durante el rodaje en Bolivia, donde pidieron a las autoridades cerrar el centro de Cochabamba para rodar las revueltas de 2000, al igual que se ve en el filme, "notas que estás trabajando con gente que está sobreviviendo", comenta.
Los extras bolivianos, si tenían día de mercado no acudían al rodaje y en la selva los campesinos no aceptaron trabajar en el filme: "Tu película les va a arreglar un día y su puesto de mercado es su medio de subsistencia".
La cinta "denuncia" y transmite "unos valores muy claros", pero "intenta matizar, hablar de muchas cosas a diferentes niveles", según Bollaín, actriz y directora de "Te doy mis ojos" u "Hola, ¿estás sola?"
"Lo que me fascinaba era la posibilidad de hacer algo contemporáneo y relevante, y de alguna manera paralelo a lo que pasó hace 500 años", explica Laverty, guionista de referencia de las películas "sociales" del director británico Ken Loach.
"La historia no es neutral: depende de quién la escribe y del punto de vista que toma": "Desde siempre Cristóbal Colón ha sido una figura muy controvertida", se le tiene como "un héroe, pero a expensas de olvidar que instituyó la esclavitud, mutiló a la gente que no encontraba suficiente oro", argumenta.
Por eso "es muy interesante ver qué narración de nuestra propia historia hemos aceptado", reflexiona el escritor de "La canción de Carla", "Mi nombre es Joe" o "Sweet Sixteen", que también habla de la "resistencia" ante la crisis económica actual.
"Cuando ves los recortes en toda Europa, volvemos a ver a los pobres pagar el precio de las decisiones de los banqueros y las élites financieras, y lo único que puede hacerse es resistir: me gustaría que toda Europa hiciera lo que está haciendo Francia, cerrando refinerías; si tuviéramos la resistencia y la valentía de la gente de Cochabamba, no tendríamos estos recortes" y "cambiaría todo el escenario político", formula.