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Política
‘Techo y comida. ¿Y a ti quién te rescata?’ es su ópera prima y la primera de las películas que recoge abiertamente el problema de la crisis en este país. Y lo hace con sólo dos palabras: techo y comida, lo que le faltan a Rocío y su hijo Adrián, interpretados por Natalia de Molina y Jaime López.
Y Castillo lo hace en su ciudad, Jerez, situada en la provincia más castigada por el paro en Europa, Cádiz, y a través de los ojos de una mujer, uno de los colectivos más golpeados por la crisis. Se trata de una película de ficción que recoge la historia de Rocío, una joven madre soltera que se busca la vida a diario para garantizar la educación y sustento de Adrián, su hijo de 8 años, del que teme perder la tutela. La vida de ambos se verá golpeada, una vez más, cuando llega la orden de desahucio del piso en alquiler en el que viven. Una historia demasiado real.
‘NATALINA DE MOLINA LO HA BORDADO’
Y por eso la escribió Juan Miguel que, además de director, es el guionista deTecho y comida. Se puso a ello cuando vio que a una vecina le había ocurrido lo mismo. “Es un tema que me molesta y considero que los cineastas tenemos que estar comprometidos socialmente”.
Ese guion enganchó a actrices tan consagradas como Mariana Cordero y Mercedes Hoyos y encandiló a Natalia de Molina, cuya imagen “no tiene nada que ver con el personaje de Rocío”, explica Castillo. Pero es que “lo ha bordado”. Hasta el acento: “Ella es de la parte oriental de Andalucía y hemos trabajado mucho porque yo quería que fuera realista y es perfecto”.
Por el contrario, un guion tan duro por su realidad no recibió el apoyo de ninguna Administración pública ni organización. “Es un tema que no interesa sacar políticamente y no hemos recibido ninguna ayuda”.
IDEA ANDALUZA, PRODUCTORA CATALANA
Ha sido una productora catalana, Diversa Audiovisual, la que ha financiado la totalidad del proyecto, además de las aportaciones que hicieron particulares mediante una campaña de micromecenazgo.
Un mes duró el rodaje –de noviembre a diciembre de 2014- y esas cinco semanas fueron “emocionantes”. “Desde pequeño había soñado con grabar un largo y ahora lo estaba haciendo y en mi propia ciudad”.
El 23 de abril les espera la alfombra roja del Teatro Cervantes de Málaga, donde espera que se dé mayor visibilidad a la película y haya una mayor concienciación de lo que ocurre. Mientras, él tiene claro que “su deber y responsabilidad” era hacer una película como ésta. La crisis en su versión más desoladora acaba de llegar al cine español.
