Imagen del film Los pasos dobles
El mito del búnker que Augiéras (1925-1971) cubrió de frescos en medio del desierto para luego dejar que fuera cubierto por las arenas y ser redescubierto por los "hombres del Siglo XXI" sirve de motor para la película, que pone en paralelo al pintor y escritor francés con el artista español.
"Este búnker lo hemos buscado por las zonas donde estuvo Augiéras, he encontrado alguno en las zonas donde podría haber estado, pero ninguno tenía frescos", relató Barceló, que suele viajar a Mali, donde se rodó la película.
La historia de Augiéras, escritor y pintor, pero también aventurero que pasó mucho tiempo en Africa, permite a Lacuesta encadenar una serie de escenas e imágenes africanas, para mostrar a Barceló trabajando y hablar de la influencia africana en la obra del artista español.
"Más que exhibirme era ir trabajando y dejar que hubiera una cámara", añadió Barceló, acerca de una película que suscitó opiniones encontradas entre el público y la prensa presente en la proyección del film dentro de la sección oficial a concurso del certamen donostiarra.
Imágenes de Barceló trabajando con acuarela sobre un cuaderno o utilizando obras suyas destruidas por las termitas para crear otras se suceden superpuestas con el viaje imaginario de François Augiéras, un personaje al que, según Barceló, "poca gente conoce".
"Debe ser un pequeño club de 50 personas en Europa que conozcan a Augiéras. Debe vender 10 o 15 libros por año, me dice su editor", explicó el autor de la decoración de la cúpula de la sede de las Naciones Unidas en Ginebra, que en la película muestra un funeral malí dedicado al artista francés.
La película, que se complementa con otra cinta, "El cuaderno de barro", también sobre el trabajo de Barceló en Africa, compite por la Concha de Oro a la mejor película, junto con el otro film de la sección oficial presentado este lunes "The deep blue sea", protagonizado por Rachel Weisz y Tom Hiddleston.
La última película de Terence Davies, acogida también por el público con división de opiniones, retrata la historia de una mujer que abandona a su marido, un juez bien posicionado, para irse a vivir con un ex piloto militar en la Inglaterra de los años 50.
La película "es sobre la naturaleza del amor y el meollo de la película es que cada personaje, su marido, ella (la protagonista, interpretada por Weisz) y Freddie, se quieren, pero se quieren de maneras diferentes y no pueden dar al otro lo que quiere", explicó el director de películas como "El largo día acaba".
Tom Hiddleston, que interpreta al ex piloto militar Freddie Pages, insiste también en que es "una película sobre el triunfo de los sentimientos", aunque éstos no siempre tienen porque llevar a buen puerto.
Tanto Hiddleston como Weisz están magníficos en sus papeles, que en ocasiones, especialmente en el caso de la protagonista, alcanzan momentos de gran tensión, y podría ponerles en el camino de la Concha de Plata a las mejores interpretaciones tanto femenina como masculina.
La competición en el certamen donostiarra seguirá el martes con la proyección de la película francesa "Le Skylab" de Julie Delphy, y la japonesa "Kiseki/I wish" de Hirozaku Kore-eda.
"Este búnker lo hemos buscado por las zonas donde estuvo Augiéras, he encontrado alguno en las zonas donde podría haber estado, pero ninguno tenía frescos", relató Barceló, que suele viajar a Mali, donde se rodó la película.
La historia de Augiéras, escritor y pintor, pero también aventurero que pasó mucho tiempo en Africa, permite a Lacuesta encadenar una serie de escenas e imágenes africanas, para mostrar a Barceló trabajando y hablar de la influencia africana en la obra del artista español.
"Más que exhibirme era ir trabajando y dejar que hubiera una cámara", añadió Barceló, acerca de una película que suscitó opiniones encontradas entre el público y la prensa presente en la proyección del film dentro de la sección oficial a concurso del certamen donostiarra.
Imágenes de Barceló trabajando con acuarela sobre un cuaderno o utilizando obras suyas destruidas por las termitas para crear otras se suceden superpuestas con el viaje imaginario de François Augiéras, un personaje al que, según Barceló, "poca gente conoce".
"Debe ser un pequeño club de 50 personas en Europa que conozcan a Augiéras. Debe vender 10 o 15 libros por año, me dice su editor", explicó el autor de la decoración de la cúpula de la sede de las Naciones Unidas en Ginebra, que en la película muestra un funeral malí dedicado al artista francés.
La película, que se complementa con otra cinta, "El cuaderno de barro", también sobre el trabajo de Barceló en Africa, compite por la Concha de Oro a la mejor película, junto con el otro film de la sección oficial presentado este lunes "The deep blue sea", protagonizado por Rachel Weisz y Tom Hiddleston.
La última película de Terence Davies, acogida también por el público con división de opiniones, retrata la historia de una mujer que abandona a su marido, un juez bien posicionado, para irse a vivir con un ex piloto militar en la Inglaterra de los años 50.
La película "es sobre la naturaleza del amor y el meollo de la película es que cada personaje, su marido, ella (la protagonista, interpretada por Weisz) y Freddie, se quieren, pero se quieren de maneras diferentes y no pueden dar al otro lo que quiere", explicó el director de películas como "El largo día acaba".
Tom Hiddleston, que interpreta al ex piloto militar Freddie Pages, insiste también en que es "una película sobre el triunfo de los sentimientos", aunque éstos no siempre tienen porque llevar a buen puerto.
Tanto Hiddleston como Weisz están magníficos en sus papeles, que en ocasiones, especialmente en el caso de la protagonista, alcanzan momentos de gran tensión, y podría ponerles en el camino de la Concha de Plata a las mejores interpretaciones tanto femenina como masculina.
La competición en el certamen donostiarra seguirá el martes con la proyección de la película francesa "Le Skylab" de Julie Delphy, y la japonesa "Kiseki/I wish" de Hirozaku Kore-eda.