Y fue en el circo, su pasión de toda la vida, que este nativo de Baltimore, Maryland (este de EEUU), vio la oportunidad de mezclar las artes callejeras, la acrobacia y el hip-hop. Así, en 1994 en Atlanta (Georgia, sureste), nació el UniverSoul Circus.
En esta ciudad con una fuerte población de raíces africanas, este circo de tamaño modesto y alma negra, cuyo nombre evoca la música soul, encontró su público... Y desde entonces, la troupe de artistas de Walker llevó su arte incluso hasta Sudáfrica.
Recientemente, en National Harbor, cerca de Washington, UniverSoul atrajo a unas 2.300 personas, la mayoría negras, seducidas por un espectáculo "un poco raro, moderno y con estilo y un aspecto multicultural", como lo describe su fundador.
"Ya era hora", dijo Walker a la AFP, porque "no veía un espectáculo para todas las edades que reflejara el estilo de vida urbano, la energía, la música" de la cultura negra de la época.
Los distintos números que conforman el show tienen como fondo la música negra de todas las épocas: el soul, el Motown, el rap. Y a diferencia de los circos tradicionales, en el UniverSoul Circus los artistas y el público interactúan.
150 artistas en la pista
Makeba Gabriel, que soñaba con ser "bailarina de limbo" en el carnaval de Trinidad y Tobago, donde se crió, ahora ejerce su oficio en la pista del UniverSoul.
Para ella, nada parece más fácil que curvarse de espaldas para pasar por debajo de obstáculos mientras la música suena. "Es un juego de niños". Desde hace siete años, se contorsiona para pasar debajo de cinco hileras de llamas ubicadas a 25 cm del suelo.
El espectáculo, que mezcla danza sobre zancos, trajes coloridos y referencias al carnaval antillano o a James Brown, está a cargo de 150 artistas de alto nivel internacional.
No todos son negros. Los hermanos vietnamitas Giang Quoc Nghiep, de 24 años, y Giang Quoc Co, de 29, fueron formados en la escuela de circo de Ciudad Ho Chi Minh. Estos dos jóvenes equilibristas, ya veteranos en el ambiente del circo europeo, ganaron premios en festivales de Italia y Cuba. UniverSoul es su primera incursión en suelo estadounidense.
El sudafricano Daniel Malatsi, más conocido como "Lucky", tenía nueve años cuando se unió a la caravana de UniverSoul, en gira por su país, hace más de una década. Actualmente, además de ofrecer sus acrobacias y pasos de baile, es uno de los animadores del show.
Para él, la vida en la carretera, de pueblo en pueblo con su esposa e hijo de tres años, es "divertida". "Tengo a mi familia conmigo, así que tengo todo lo que necesito".
Cedric Walker ha trabajado con muchos artistas en el mundo del entretenimiento, incluyendo el grupo de raperos Salt-n-Pepa en la década de 1980. Pero para él, los artistas de circo son "los más subestimados del mundo".
"Dan mucho de sí... El circo es un reflejo de la vida... He estado con muchos cantantes y raperos, pero me he vuelto muy aficionado a estos artistas por lo que son capaces de hacer y de dónde vienen".
En esta ciudad con una fuerte población de raíces africanas, este circo de tamaño modesto y alma negra, cuyo nombre evoca la música soul, encontró su público... Y desde entonces, la troupe de artistas de Walker llevó su arte incluso hasta Sudáfrica.
Recientemente, en National Harbor, cerca de Washington, UniverSoul atrajo a unas 2.300 personas, la mayoría negras, seducidas por un espectáculo "un poco raro, moderno y con estilo y un aspecto multicultural", como lo describe su fundador.
"Ya era hora", dijo Walker a la AFP, porque "no veía un espectáculo para todas las edades que reflejara el estilo de vida urbano, la energía, la música" de la cultura negra de la época.
Los distintos números que conforman el show tienen como fondo la música negra de todas las épocas: el soul, el Motown, el rap. Y a diferencia de los circos tradicionales, en el UniverSoul Circus los artistas y el público interactúan.
150 artistas en la pista
Makeba Gabriel, que soñaba con ser "bailarina de limbo" en el carnaval de Trinidad y Tobago, donde se crió, ahora ejerce su oficio en la pista del UniverSoul.
Para ella, nada parece más fácil que curvarse de espaldas para pasar por debajo de obstáculos mientras la música suena. "Es un juego de niños". Desde hace siete años, se contorsiona para pasar debajo de cinco hileras de llamas ubicadas a 25 cm del suelo.
El espectáculo, que mezcla danza sobre zancos, trajes coloridos y referencias al carnaval antillano o a James Brown, está a cargo de 150 artistas de alto nivel internacional.
No todos son negros. Los hermanos vietnamitas Giang Quoc Nghiep, de 24 años, y Giang Quoc Co, de 29, fueron formados en la escuela de circo de Ciudad Ho Chi Minh. Estos dos jóvenes equilibristas, ya veteranos en el ambiente del circo europeo, ganaron premios en festivales de Italia y Cuba. UniverSoul es su primera incursión en suelo estadounidense.
El sudafricano Daniel Malatsi, más conocido como "Lucky", tenía nueve años cuando se unió a la caravana de UniverSoul, en gira por su país, hace más de una década. Actualmente, además de ofrecer sus acrobacias y pasos de baile, es uno de los animadores del show.
Para él, la vida en la carretera, de pueblo en pueblo con su esposa e hijo de tres años, es "divertida". "Tengo a mi familia conmigo, así que tengo todo lo que necesito".
Cedric Walker ha trabajado con muchos artistas en el mundo del entretenimiento, incluyendo el grupo de raperos Salt-n-Pepa en la década de 1980. Pero para él, los artistas de circo son "los más subestimados del mundo".
"Dan mucho de sí... El circo es un reflejo de la vida... He estado con muchos cantantes y raperos, pero me he vuelto muy aficionado a estos artistas por lo que son capaces de hacer y de dónde vienen".