Las consultas se seguían con atención en Italia a la luz de los acontecimientos en Cataluña, donde las autoridades regionales impulsan la secesión del Gobierno español.
En Véneto, el 98,1 por ciento de los votantes apoyaron el "sí" en la consulta, con una participación de alrededor del 57 por ciento, superando así el 50 que tenía como piso para que fuera válida, según el recuento final.
"Objetivo alcanzado. Comienza una nueva historia para nuestro Véneto", dijo el presidente de la región, Luca Zaia, en Facebook. Zaia habló sobre supuestos hackeos al gobierno regional en el conteo de los votos que podrían haber retrasado el resultado final.
En Lombardía, el 95,3 por ciento de los votantes dijo "sí". La participación fue en este caso del 40 por ciento, aunque no hacía falta un mínimo para validar la consulta.
"Tengo un encargo importante de implementar el mandato histórico que me dieron millones de personas en Lombardía de lograr una verdadera autonomía", declaró el presidente de la región, Roberto Maroni.
"Espero que los ciudadanos en Lombardía y el Véneto entiendan que se trata de una oportunidad histórica y extraordinaria", había dicho Maroni antes de conocerse los resultados.
Ambos líderes regionales anunciaron que iniciarán negociaciones con el Gobierno del primer ministro, Paolo Gentiloni.
Cerca de diez millones de personas estaban convocadas a estos referendos, con los que se busca fortalecer a los gobiernos regionales a la hora de reclamar más competencias al Gobierno central, sobre todo para gestionar el dinero que se recauda en la región. A diferencia de Cataluña, en Italia no se reclama independencia.
Los presidentes de la región de Lombardía y de Véneto forman parte del Partido Liga Norte, que fue creado para escindir el rico norte del sur pobre y que ha alentado un ideario independentista.
Sin embargo, en los últimos tiempos el partido ha virado para centrarse en la xenofobia y ya no persigue la independencia de forma vehemente.
"No sólo es una victoria para la Liga Norte, sino también para la población", dijo en Twitter el líder partidario, Matteo Salvini.
La cúpula del partido ha insistido en varias ocasiones que las consultas se desarrollaban en el marco de la Constitución y que no se está hablando de independizarse de Italia.
"Siempre hemos dicho que queremos este camino para la autonomía. Seguimos un camino democrático y legal en consonancia con la Constitución", había dicho Zaia.
El presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, también respaldó la celebración de las consultas en Italia y lo comparó con lo que ocurre en Cataluña.
"Ambos referendos son legítimos, mientras que el de Cataluña no lo era. Y el referéndum catalán era por la independencia, mientras que en Lombardía y el Véneto es por más autonomía", dijo Tajani en declaraciones al diario "Il Messaggero".
En Véneto, el 98,1 por ciento de los votantes apoyaron el "sí" en la consulta, con una participación de alrededor del 57 por ciento, superando así el 50 que tenía como piso para que fuera válida, según el recuento final.
"Objetivo alcanzado. Comienza una nueva historia para nuestro Véneto", dijo el presidente de la región, Luca Zaia, en Facebook. Zaia habló sobre supuestos hackeos al gobierno regional en el conteo de los votos que podrían haber retrasado el resultado final.
En Lombardía, el 95,3 por ciento de los votantes dijo "sí". La participación fue en este caso del 40 por ciento, aunque no hacía falta un mínimo para validar la consulta.
"Tengo un encargo importante de implementar el mandato histórico que me dieron millones de personas en Lombardía de lograr una verdadera autonomía", declaró el presidente de la región, Roberto Maroni.
"Espero que los ciudadanos en Lombardía y el Véneto entiendan que se trata de una oportunidad histórica y extraordinaria", había dicho Maroni antes de conocerse los resultados.
Ambos líderes regionales anunciaron que iniciarán negociaciones con el Gobierno del primer ministro, Paolo Gentiloni.
Cerca de diez millones de personas estaban convocadas a estos referendos, con los que se busca fortalecer a los gobiernos regionales a la hora de reclamar más competencias al Gobierno central, sobre todo para gestionar el dinero que se recauda en la región. A diferencia de Cataluña, en Italia no se reclama independencia.
Los presidentes de la región de Lombardía y de Véneto forman parte del Partido Liga Norte, que fue creado para escindir el rico norte del sur pobre y que ha alentado un ideario independentista.
Sin embargo, en los últimos tiempos el partido ha virado para centrarse en la xenofobia y ya no persigue la independencia de forma vehemente.
"No sólo es una victoria para la Liga Norte, sino también para la población", dijo en Twitter el líder partidario, Matteo Salvini.
La cúpula del partido ha insistido en varias ocasiones que las consultas se desarrollaban en el marco de la Constitución y que no se está hablando de independizarse de Italia.
"Siempre hemos dicho que queremos este camino para la autonomía. Seguimos un camino democrático y legal en consonancia con la Constitución", había dicho Zaia.
El presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, también respaldó la celebración de las consultas en Italia y lo comparó con lo que ocurre en Cataluña.
"Ambos referendos son legítimos, mientras que el de Cataluña no lo era. Y el referéndum catalán era por la independencia, mientras que en Lombardía y el Véneto es por más autonomía", dijo Tajani en declaraciones al diario "Il Messaggero".