"Necesitamos libros más que nunca. Uno se debe concentrar mucho cuando lee un libro y eso es muy estimulante y muy bueno para el cerebro y el alma", señaló la intérprete de 46 años en declaraciones a dpa.
"Solo en un libro hay mucho espacio para los matices, para las dudas o para la escala de grises de la vida que luego se examinan en detalles. En la televisión o en las llamadas redes sociales, por el contrario, el contenido se abrevia y cada uno piensa en su propia verdad", agregó.
"Eso me asusta: cuando la gente cree que tiene toda la razón, entonces es cuando algo sale mal", recalcó.
Mortimer se encuentra en la actualidad en Alemania, país en el que se estrena ahora "La librería", premiada como mejor película en la pasada edición de los premios Goya en España.
Basada en la novela homónima de Penelope Fitzyerald, el filme se ambienta en la Inglaterra de los años 50. La viuda Florence Green (Emily Mortimer) decide abrir una librería en un pequeño pueblo pero se encuentra con la resistencia de la cacique local, interpretada por Patricia Clarkson, y con la inesperada ayuda de un hombre que vive aislado de la comunidad, encarnado por Bill Nighy.
"Solo en un libro hay mucho espacio para los matices, para las dudas o para la escala de grises de la vida que luego se examinan en detalles. En la televisión o en las llamadas redes sociales, por el contrario, el contenido se abrevia y cada uno piensa en su propia verdad", agregó.
"Eso me asusta: cuando la gente cree que tiene toda la razón, entonces es cuando algo sale mal", recalcó.
Mortimer se encuentra en la actualidad en Alemania, país en el que se estrena ahora "La librería", premiada como mejor película en la pasada edición de los premios Goya en España.
Basada en la novela homónima de Penelope Fitzyerald, el filme se ambienta en la Inglaterra de los años 50. La viuda Florence Green (Emily Mortimer) decide abrir una librería en un pequeño pueblo pero se encuentra con la resistencia de la cacique local, interpretada por Patricia Clarkson, y con la inesperada ayuda de un hombre que vive aislado de la comunidad, encarnado por Bill Nighy.